Los intervenitores judiciales, estiman en sólo 5.000 millones el valor de Ercros

El informe remitido por los interventores judiciales de Ercros al Juzgado número 5 de Barcelona considera que el grupo quimico tiene un valor aproximado de 5.000 millones de pesetas, aunque reconoce que el activo es superior al pasivo en 20.000 millones, y califica su situación de insolvencia provisional. Josep Piqué, presidente de la química, anunció que recurrirá contra el informe. Por otra parte, la papelera Sarrió ha demandado a KIO por impago de 8.650 millones.El informe recoge la existencia de avales otorgados por Ercros a sociedades del grupo en suspensión de pagos por casi 16.000 millones y que los interventores consideran seguro que le serán reclamados. Por ello, la valoración real se reduce a unos 5.0100 millones.

El presidente de Ercros, Josep Piqué, afirmó ayer que no conoce el informe, aunque mostró su extrañeza ante el cambio a última hora del criterio de los interventores, "por motivos que no me puedo explicar", dijo. Piqué agregó que los interventores le habían informado que el dictamen recogería un superávit del activo de 30.000 millones. A juicio del presidente de Ercros, no tiene sentído incluir los avales a Fesa-Enfersa en el pasivo de Ercros, cuando esos créditos ya están incluidos en el pasivo de la filial. El informe acusa al anterior equipo gestor de aplicar "de forma injustificada una centralización de los recursos financieros que perjudicó al conjunto del grupo".

Además de las deudas ya reconocidas en la suspensión de pagos, el informe incluye en el pasivo 8.000 millones correspondientes al fondo de pensiones. Los interventores se han apoyado en un dictamen del Colegio de Economistas de Barcelona. En el caso de la filial de fertilizantes -Fesa-Enfersa, también en suspensión de pagos-, los interventores entregaron al juzgado de Madrid un dictamen positivo en 3.666 millones, que no incluía los 15.000 millones de las pensiones.

Ayer también se supo que la reclamación de la papelera Sarrió -controlada por el grupo italiano Saffa- contra KIO, KIA (organismo del que depende KIO) y varias de sus filiales españolas asciende a 8.647 millones de pesetas. La reclamación corresponde al pago aplazado en la compra de las fábricas que Sarrió transmitió a Torras en febrero de 1991. El precio de los activos vendidos por Sarrió a Torras Papel se estableció en 43.600 millones, de los que 15.000 se pagaban en efectivo a tres años, mediante recompra de acciones de Torras Papel. Al suspender pagos Grupo Torras, quedaron pendientes 8.650 millones.

Ayer, el Grupo Torras, el Instituto de Crédito Oficial (ICO) y la banca acreedora al canzaron un acuerdo de apoyo a Torraspapel. El Grupo Torras otorgará nueva financiación hasta 2.500 millones de pesetas y renuncia a 22.000 millones que le adeuda su filial. El ICO concederá un crédito de 15.000 millones.