El Círculo gastará en una noche de carnaval lo que el Ayuntamiento en los dos días de fiesta
Los carnavales, este año, también se disfrazarán de crisis. El ajuste económico impedirá grandes dispendios de las entidades públicas y privadas que organizan las fiestas, y obligará a forzar la imaginación a la hora de elegir la vestimenta apropiada para pasar inadvertido. El Ayuntamiento de Madrid, en plena recesión, ha recortado la festividad a sólo dos jornadas, en las que invertirá 10 millones de pesetas. El Círculo de Bellas Artes, la entidad particular con más tradición en este aspecto, gastará lo mismo en una noche de acceso privado, y en la que las vacas serán el motivo central.
Esperanza Aguirre debutó ayer como concejal de Cultura para presentar el Carnaval más breve y económico de los últimos años. Los actos se concentran en dos días (viernes y sábado), a excepción del tradicional entierro de la sardina, que se celebrará el miércoles.Los 10,5 millones de pesetas que se gastará el Ayuntamiento no dan para mucho: el desfile de carrozas, un espectáculo infantil en el Centro Cultural y dos sesiones de baile nocturno en la carpa del Conde Duque. Tan "gris panorama", según lo calificó el concejal socialista Ramón Herrero, era motivo de orgullo para Aguirre: "Hemos logrado promover una fiesta tradicional sin encorsetar [económicamente] al Ayuntamiento". Izquierda Unida también fue crítica: "El PP ha condenado los carnavales a la clandestinidad".
Aguirre, en línea con el anterior concejal, el destituido Pedro Ortiz, opta por fomentar la iniciativa privada y que los patrocinadores exploten los escenarios municipales. El Ayuntamiento gastó 110 millones en 1991 y 78 en 1992.
La corporación ha designado este año a Pedro Ruiz como pregonero y a la miss España Sofía Mazagatos como musa. Ruiz, que se asomará el viernes al balcón de la plaza de la Villa, comentó ayer: "En Carnaval, se sabe de qué va disfrazado el otro, lo que no ocurre habitualmente". Mazagatos se vestirá el sábado con un traje de tigresa, según diseño de Alfredo Caral, para participar en la cabalgata.
El desfile se celebrará en la Castellana, en el tramo situado entre la plaza de Lima y la de San Juan de la Cruz. Abandona así el tradicional itinerario de Recoletos para proteger del gentío a las plantaciones efectuadas por Aguirre desde el área de Medio Ambiente.
Las vacas del Círculo
El Círculo de Bellas Artes, por otra parte, mantiene como tradición desde 1880 celebrar bailes de carnavales y de disfraces, y este año se ha sumado al clima de escasez con esta propuesta: frente a la crisis, las vacas. Entrar en el baile de máscaras del Círculo, que empezará el próximo sábado a las once de la noche y acabará a las seis de la madrugada, cuesta 3.000 pesetas para los socios y 7.000 para los demás interesados, hasta un límite de 3.500 personas. El Círculo ha editado 50.000 folletos bajo el lema Esto no es una crisis.El baile, amenizado por tres orquestas y dos charangas, será presentado por Anabel Alonso. Esta musa competirá con Sofía Mazagatos y, dentro de la sede del Círculo, con las vacas. José Luis Raymond, el autor y director del proyecto del Carnaval 93 del Círculo, presupuestado en 10 millones de pesetas, ha encontrado en las vacas un significado que remarca lo "bacanal" de esta celebración.
La decoración para esta ocasión hace referencia, con manchas de blanco y negro, a este animal, y de hecho la presentación ayer del baile contó con un ejemplar real como testigo. A María, lechera, de tres años y unos 500 kilos de peso, le costó entrar y salir el edificio pese a estar acostumbrada a las cámaras tras interpretar varios papeles para el cine. Luego se habituó y llegó a evacuar sobre una alfombra. La elección de las vacas tiene justificación casi de prueba psicológica. Raymond: "Vaca como concepto de carne, mancha, leche, camuflaje, simulacro, de combinación del blanco y del negro". Un lazo rojo apoyará la subversión con un mensaje contra el sida.
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