Tapie vende Adidas a un grupo publico francés

El empresario y político marsellés Bernard Tapie sigue dando que hablar. Blanqueado recientemente por la justicia por el presunto delito de fraude y repescado a continuación por el Gobierno socialista como ministro de la Ciudad, el nombre de Tapie vuelve a asociarse al escándalo. A cinco semanas de unas elecciones legislativas que van a expulsar a los socialistas del Gobierno, Tapie ha vendido Adidas a un grupo de empresas nacionalizadas, y a muy buen precio. La derecha está indignada.

Tapie, que dice querer poner término a su carrera de empresario y consagrarse exclusivamente a la política, no sabía cómo desembarazarse de Adidas, la firma alemana de prendas deportivas que compró en julio de 1990. Tras estudiar con detalle las cuentas, el grupo británico Pentland, interesado en principio en la operación, le dio nones el año pasado. Pentland rechazaba pagar casi el doble de lo que le había costado Adidas a Tapie.El marsellés siguió buscando compradores, y los encontró. En la localidad alemana de Herzogenaurach se anunció ayer la nueva composición del capital del número tres mundial en la fabricación de prendas deportivas. Adidas sigue en manos francesas. Un grupo formado por tres empresas nacionalizadas -el banco Crédit Lyonnais y las compañías de seguros AGF (Assurances Generales de France) y UAP (Union des Assurances de Paris)- aumenta su participación en Adidas desde el 17% al 47%. El empresario francés Robert-Louis Dreyfus, con un 15%, ejercerá el papel de operador industrial.

La polémica ya había estallado el pasado fin de semana. Dos hechos suscitaron la curiosidad general: el elevado precio de venta -Tapie ha vendido su parte de Adidas por unos 2.070 millones de francos (unos 43.500 millones de pesetas) y la había comprado por 1.600 millones de francos (33.600 millones de pesetas)- y la participación de empresas públicas en la operación. "¿No es chocante ver a un ministro en ejercicio ceder a sociedades nacionalizadas un grupo que no está en su mejor forma, y ello a algunas semanas de las legislativas?", decía ayer el diario Le Parisien.

La derecha exige la creación de una comisión parlamentaria de investigación. "Es como mínimo sospechoso que, a un mes de su abandono del poder, Tapie haya podido vender Adidas a tan buen precio a tres empresas nacionalizadas", afirma el diputado centrista François D'Aubert. Alain Juppé, secretario general de la gaullista Asamblea para la República, tiene la misma reacción.

Esta polémica sigue a la suscitada hace unas semanas por la venta de Yves Saint-Laurent a la compañía nacionalizada de petróleo Elf Aquitaine. Elf pagó por Yves Saint-Laurent 642 millones de dólares (75.000 millones de pesetas), una cifra considerada "extravangante" por los especialistas de la Bolsa de París.