Clinton asegura que creará medio millón de puestos de trabajo a corto plazo

El presidente estadounidense, Bill Clinton, aseguró ayer que su plan económico, cuyos detalles anunciará mañana ante el Parlamento, modificará el rumbo seguido por Estados Unidos durante 12 años -lo que se ha conocido como la Reaganomics- y permitirá la creación de medio millón de puestos de trabajo, que es la demanda más compartida por la población en estos momentos.

El presidente Bill Clinton se reunió ayer con líderes parlamentarios para trazar los últimos detalles del programa que anunciará en su discurso sobre el Estado de la Unión, la que puede ser la alocución más importante de su Gobierno, la que. muestre el camino que pretende recorrer la nueva Administración demócrata para reformar la sociedad norteamericana.Al término del su reunión con los parlamentarios, Clinton comentó brevemente a los periodistas que su plan "tratará de cambiar la dirección de 12 años, tomar un nuevo curso". "Voy a ofrecer un programa que va a crear medio millón o más de puestos de trabajo a corto plazo", afirmó el presidente.

Antes de comparecer mañana ante el Congreso, Clinton quiso explicarle ayer a la nación, en un discurso televisado, que será necesario el sacrificio de todos los sectores del país para resolver los problemas de la economía.

En una intervención que debía comenzar a las nueve de la noche, hora de Washington (tres de la madrugada en España), el presidente tenía previsto anunciar las líneas gene rales de su plan, que incluye aumentos de impuestos, reducciones de algunos gastos públicos y un programa de in versiones estatales para estimular el crecimiento de la economía estadounidense.

Bill Clinton quiso continuar con su línea de mantenerse en contacto con la población al dar prioridad a la audiencia televisiva antes que al Parlamento para desvelar algunas de sus ideas económicas. Ronald Reagan también utilizó esta fórmula al anunciar su primer programa económico en febrero de 1981.

Uno de los aspectos más controvertidos del plan económico de la Administración demócrata es el de los impuestos. Clinton ha advertido ya que habrá una importante subida de la carga fiscal sobre los más ricos -probablemente un aumento de cinco puntos en las rentas que actualmente cotizan el 31%- así como sobre las grandes corporaciones y las empresas extranjeras que inviertan en Estados Unidos. "Construiremos un país en el que incluso los más privilegiados tendrán que contribuir en una proporción justa", dijo Clinton en su discurso radiofónico del pasado sábado.

Clases medias

Todavía es una incógnita la política respecto a los impuestos de las clases medias. El presidente ha asegurado que a todos los norteamericanos se les pedirá un esfuerzo para hacer frente a la situación económica, aunque todavía no está claro si eso significa más impuestos para todos.El director de Presupuesto de la Casa Blanca, Leon Panetta, ha explicado que "todo el mundo tendrá que contribuir de alguna manera, aunque no necesariamente tiene que ser con impuestos, puede ser con reducción de beneficios".

Con vistas a la reducción de un déficit de 300.000 millones de dólares, el objetivo de Bill Clinton es recortar un dólar del gasto del Gobierno por cada dólar que se aumente de impuestos. La semana pasada el presidente estadounidense anunció la reducción de 100.000 puestos de trabajo de la Administración federal con objeto de recortar los gastos estatales, pero no se sabe si eso será suficiente para compensar los 30.000 millones de dólares del paquete de inversión pública que el Gobierno norteamericano quiere poner en marcha para acelerar el crecimiento.