Craxi amenaza con revelar "muchas cosas" para limpiar su nombre

El ex secretario del Partido Socialista Italiano (PSI), Bettino Craxi, ha insinuado que no dudará en hacer revelaciones explosivas en la batalla para limpiar su nombre de las acusaciones de corrupción. "Voy a tener que hacer públicas muchas cosas", declaró este pasado fin de semana.Craxi, que tiene ya seis sumarios abiertos por su presunta relación con la financiación ilegal de su partido, dejó su cargo en el PSI el pasado jueves, tras 16 años de liderazgo indiscutido. La pregunta que se hacen ahora sus compañeros es si Craxi, en su intento de zafarse de las acusaciones, será capaz de hacer declaraciones que pueden dinamitar la coalición de Gobierno que preside el socialista Giuliano Amato.

Mientras tanto, desde la judicatura italiana se ha prometido "una semana caliente" en la investigación de la corrupción política. "No nos podemos parar ahora que el tumor se ha extirpado sólo parcialmente", declaró ayer el presidente del Tribunal de Apelaciones de Milán, Piero Pajardi.

La inestabilidad provocada por las investigaciones judiciales de la Operación Manos Limpias también se deja notar en la Democracia Cristiana (DC). El dirigente Mario Segni ha propuesto al secretario general democristiano, Mino Martinazzoli, "romper con la parte de la DC" afectada por la investigación y "trasplantar en una nueva estructura la experiencia de, los católicos democráticos". Martinazzoli ha contestado que la DC se está reformando ya y que no tiene ninguna intención de dejar esta formación, a la que ha definido como "un partido vivo, con su identidad y su tradición". "El camino justo es poner la política del partido al ritmo de los tiempos, sin desperdiciar su historia", ha dicho Martinazzoli.

Precisamente ayer el democristiano Paolo Cirino Pomecino, ex ministro de Presupuestos, muy próximo al ex presidente Giulio Andreotti, dejó el cargo que ocupaba en la comisión nacional de la DC después de que los jueces le comunicaran la apertura de un sumario por su relación con el cobro de comisiones ilícitas por los trabajos del puerto de Manfredonia.