PP decide que alcaldes y presidentes provinciales no puedan ser diputados

El congreso de] Partido Popular (PP) endureció las incompatibilidades sobre el texto de la ponencia al establecer que los diputados no podrán simultanear sus cargos con los de alcalde y presidente de diputación. Tal medida se adopta para evitar conflictos internos y disminuir el poder de algunas personalidades del partido. El congreso también dio luz verde a la propuesta de administración única, planteada por Manuel Fraga, con sólo cinco votos en contra y una sola abstención, precedida del debate más vivo de las sesiones. "Nadie le gana a este partido en defender la unidad de España", dijo el ponente Mariano Rajoy, en réplica al eurodiputado Fernando Suárez.

Con el sistema de incompatibilidades aprobado ayer por el congreso de los populares una veintena de diputados del PP tendrán que optar entre el escaño en el Congreso o su cargo al frente de una alcaldía, una diputación o cargos de dirección interna provincial y regional. Es el caso de presidentes provinciales del partido, como Soledad Becerril Mariano Rajoy, Luis Ramallo, Santiago López Valdivieso, Felipe Camisón, Juan Carlos Aparicio, Diego Jordano, Jorge Hernández, Francisco Tomey y Juan Manuel Fabra.Esta medida, limitada, según la ponencia a los cargos dirigentes internos, se extendió también ayer a los alcaldes y presidentes de diputación que no podrán simultanear esos cargos con el de diputado. Esta medida afecta por ejemplo, a Jesús Mañueco, presidente de la Diputación de Palencia; a Juan Morano, alcalde de León, y a Luis Fernando Cartegena, de Orihuela. Para no hacer traumática esta medida, el Congreso del PP aprobó un periodo de transición para su ejecución. Sus afectados, si optan por abandonar el escaño en el Congreso, tendrán de plazo hasta el fin de la legislatura.

Federico Trillo, ponente del PP, invocó a José María Aznar como impulsor de estas medidas, que -tienen como objetivo "transmitir a la sociedad, dando ejemplo con un sacrificio y un coste personal, la idea de llevar la bandera de la regeneración de la vida pública". La medida, según la dirección del PP, implica la eliminación de conflictos, evita la acaparación del poder en manos de algunos líderes territoriales y abre paso a nuevos militantes.

Fracasó, sin embargo, la pretensión de Félix Pastor de extender la incompatibilidad a José María Aznar como presidente del Grupo Parlamentario Europeo: Aznar ostentará la presidencia de todos los grupos parlamentarios. Trillo admitió que el PP es un partido de "liderazgo fuerte".

La propuesta de administración única, planteada por Manuel Fraga, y que la tarde del viernes originó el debate más vivo del congreso, pasó ayer por el pleno holgadamente, con sólo cinco votos en contra. Su ponente, Mariano Rajoy, hizo una defensa apasionada de la propuesta y replicó al eurodiputado Fernando Suárez que la víspera había acusado a la dirección del PP de "dejar en manos de los socialistas la bandera de la unidad de España" con la propuesta.

Rajoy insistió en que la administración única "no significa la desaparición de la administración periférica del Estado sino una simplificación y mejoría de la Administración". Rajoy añadió que la propuesta se ampara en el artículo 150.2 de la Constitución y que "la titularidad de las competencias que se pueden transferir a las autonomías para que las ejecuten las mantiene el Estado".

Defendió también la reforma del Senado para transformarlo en cámara territorial; la cesión de una parte del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) a las autonomías siempre que garantice la solidaridad y la participación en la gestión; y anunció iniciativas para dotar de estatutos a "las ciudades españolísimas de Ceuta y Melilla".