Los aspirantes a policías en San Fernando fueron examinados sobre su vida sexual

Los aspirantes a cubrir dos plazas vacantes de policía local en San Fernando de Henares (municipio de 26.000 habitantes) han tenido que contestar en un cuestionario de investigación psicológica a preguntas anticonstitucionales, según denunció ayer Izquierda Unida en el transcurso de un pleno. El cuestionario, denominado PSY, consta de 236 preguntas, y los derechos del mismo son propiedad de Psicomat, según refleja el propio documento.

En el documento se recogen cuestiones como éstas: ¿Ha estado separado o divorciado o desearía estarlo?; a la edad en que fue a la escuela, ¿había dejado de orinarse en la cama?; ¿fue usted hijo ¡legítimo, adoptado o recogido por la Beneficencia?A causa de esta prueba de selección 15 aspirantes quedaron en el camino, según aseguró Fernando Martínez, concejal de Izquierda Unida.

Portadores de armas

José Luis Naranjo, concejal independiente integrado en el equipo de Gobierno junto con el PSOE y presidente de la mencionada comisión, asegura que, como él no es psicólogo, se limitó a seguir las instrucciones de los expertos, entre los que se encontraba un representante de la Academia Regional de Estudios de Seguridad, organismo dependiente de la Comunidad de Madrid. Naranjo indicó que el representante de la Comunidad les dijo que este cuestionario, y otro denominado M-16, son los únicos que existen para definir la personalidad de personas que en el futuro deben portar armas.El concejal responsable de la policía local señaló que los resultados del cuestionario son totalmente confidenciales y la contestación a las preguntas, voluntaria. Sin embargo, en las instrucciones del cuestionario se asegura que éste tiene como objeto "precisar ciertos detalles psicológicos" para lo que es necesario que se responda "muy sinceramente".

Tanto Jesús Sánchez, portavoz del grupo socialista, como el alcalde, Luis Enrique Piñas, aseguraron desconocer las preguntas, y añadieron que la comisión de selección estudiará la posibilidad de anular el cuestionario y buscar una prueba alternativa.

Esta decisión, apoyada por los grupos de la oposición, se adoptó después de que el edil Martínez leyera públicamente alguna de las preguntas: "¿Tiene la impresión de que alguno de sus órganos no funciona en absoluto o bien le falta?, ¿experimenta una cierta atracción por las personas de su mismo sexo?

Una persona de la firma Psicomat aseguró ayer a EL PAÍS que no podía hacer declaraciones, ya que la directora de la firma estaba ausente.