El Gobierno abrirá la negociación sobre la reforma laboral la próxima semana

"El Gobierno tiene prisa, y quiere iniciar la negociación para la reforma del mercado de trabajo tan pronto como sea posible" aseguró ayer en Logroño el ministro de Economía, Carlos Solchaga. "Esa prisa no implica", según Solchaga, que exista "la más mínima discrepancia, ni siquiera de matiz, entre Trabajo y Economía", pues el objetivo es que la reforma esté apadrinada sin fisuras por todo el Gobierno y el partido socialista. La prisa se traduce en que los primeros contactos con los sindicatos y la patronal se producirán la próxima semana.

La negociación sobre la reforma del mercado laboral se iniciará, según dijo ayer Solchaga en Logroño, en la convicción de que "la única manera de abordarla es de modo global", es decir, tal y como subrayó el martes el ministro de Trabajo, Luis Martínez Noval.La globalidad y "la voluntad de buscar un consenso, primero con las fuerzas sociales y después con las políticas" tiene, según el ministro, un matiz. La complejidad de la negociación y el escepticismo de algunos -"como una patronal que parece haber hecho su apuesta política por el Partido Popular"- pueden prolongar mucho este proceso. Por tal motivo, añadió, el Gobierno "está decidido a sacar adelante aquellos aspectos de movilidad geográfica y funcional que están en el programa de convergencia antes de que concluya esta legislatura". Esas modificaciones no forman parte del amplio paquete que exige reformar el Estatuto de los Trabajadores, para el cual Solchaga defendió la conveniencia de lograr el consenso más amplio posible.

El titular de Economía realizó estas declaraciones poco antes de participar en un coloquio organizado por su partido. En él -bajola pancarta "la fuerza del progreso"- defendió que la política social del PSOE debe discriminar más en el futuro; "debe poner el énfasis en lo cualitativo, porque con la cobertura general a veces se cometen injusticias". Como ejemplo puso la subvención de los estudios universitarios a familias con recursos sobrados.

Horas antes del anuncio del comienzo de las negociaciones, el secretario general de Empleo, Jesús Arango, reiteraba en Barcelona la necesidad de "un cambio en profundidad" para flexibilizar las relaciones laborales, y sugería "incluir este punto en el próximo programa electoral" del PSOE.

Según Arango, la reforma debe abordarse modificando cinco puntos: El grado de autonomía para contratar y despedir, el margen de ajuste de las empresas para modificar jornadas y los turnos sin variar el número de horas de trabajo, la movilidad funcional y geográfica, la flexibilidad salarial y el coste laboral de la externalización.Acuerdo UGT-CC OO

Los sindicatos UGT y CC OO acudirán a la negociación anunciada por Solchaga después de haber limado sus diferencias. Cinco horas de reunión el jueves entre Nicolás Redondo y Antonio Gutiérrez han dado como resultado que UGT accede a negociar distintas reformas del mercado de trabajo, pero siempre que no se haga en una sola mesa global. El acuerdo se produjo una vez que Gutiérrez, secretario general de CC OO, dio toda clase de explicaciones sobre su aceptación de la oferta del Gobierno y precisó que eso no significa que admita negociar la flexibilización del despido, informa

En un comunicado conjunto, los dos sindicatos anuncian que acudirán a las negociaciones que se convoquen y reclamarán que la prioridad sea cerrar los asuntos sobre los que había principio de acuerdo, como la reforma de la contratación o las medidas para el reparto del empleo.