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Francia se reconcilia con una Argelia dispuesta al 'diálogo interior'

Argelia y Francia se han reconciliado, después de un año de tensiones y malentendidos, gracias a la visita de dos días efectuada el pasado fin de semana a Argel por el jefe de la diplomacia gala, Roland Dumas. El mismo día de la partida del ministro francés las autoridades judiciales argelinas decretaban la libertad provisional de los seis periodistas de El Watan, detenidos desde hace una semana, por publicar "prematuramente" una información. Esta decisión ha sido interpretada en medios diplomáticos como un primer paso hacia el diálogo interior.El acta de reconciliación entre París y Argel la redactó el propio presidente, de la República francesa, François Mitterrand, en un mensaje dirigido a Ali Kafi, el presidente del Alto Comité de Estado, en el que urge la necesidad de "superar todos los malentendidos que han podido surgir a lo largo de 1992". Con esta frase Mitterrand trata de enterrar los resquemores surgidos hace justa mente un año, cuando criticó la interrupción del proceso democrático.

Pero por si no quedará suficientemente clara su actitud conciliadora, el presidente francés condena en el mismo comunicado los extremismos, al afirmar que Francia, "que está fundamentalmente comprometida con la promoción de los principios de la libertad, tolerancia y democracia, no puede más que reprobar el desarrollo de los extremismos, vengan de donde vengan". Otra afirmación clave con la que el Elíseo pide disculpas por el apoyo que meses atrás concedió a los integristas.

Este mensaje fue entregado por Dumas a Ali Kafi durante la entrevista que mantuvieron el sábado. Se abría así una serie de reuniones, con los dirigentes argelinos, entre las que destaca la celebrada con el jefe del Gobierno, Belaid Abdeslam; el ministro de Defensa, Jaled Nezzar, y el miembro del Alto Comité de Estado, Reda Malek. En estos contactos se ha establecido un futuro calendario de reuniones, entre las que destaca el viaje que realizará el jefe del Gobierno argelino a París, sin olvidar las del ministro de Finanzas, el director del Tesoro y el de Asuntos Económicos a Argel para establecer planes de cooperación y ayuda económica, que permitan hacer realidad el programa de Belaid Abdeslam.

Aparentemente, no existen por parte argelina contrapartidas a la ayuda francesa, aunque Roland Dumas, en una conferencia de prensa, hizo clara referencia a la transitoriedad del Alto Comité de Estado y al decidido compromiso de Francia de estar al lado del Gobierno de Argel en estos momentos delicado. Roland Dumas habló también de la necesidad de relanzar el diálogo entre el Magreb y la Comunidad Europea a través de las reuniones de los 5 más 5, congeladas desde hace cerca de un año.

La reconciliación entre París y Argel ha provocado la euforia de la prensa local, que vivió el sábado por la tarde unos momentos de entusiasmo al conocer la puesta en libertad de los seis colegas de El Watan. Se trata de dos hechos sin relación mutua, pero que en medios políticos y diplomáticos se valoran e interpretan conjuntamente.

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