La somalí agredida niega que sea una prostituta
La muchacha somalí que fue agredida por una muchedumbre acusada de haberse prostituido con los soldados occidentales manifestó ayer en Mogadiscio, capital de Somalia, a una cadena de televisión que ella sólo había aceptado unas chocolatinas de los soldados. "No soy una prostituta. Acepté el chocolate y la gente reaccionó por envidia. Cuando empezó el asalto, unos soldados franceses intentaron protegerme, pero la gente estaba enloquecida". La muchacha está refugiada en una asociación de protección a la mujer.
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