Polémica en EE UU por un plan para que los niños respeten a los homosexuales

La inclusión de un plan para enseñar a los niños de primaria de Nueva York a respetar a los homosexuales está provocando duros enfrentamientos entre la máxima autoridad escolar y seis de los distritos de la ciudad. La negativa a aceptar el proyecto Niños del Arco Iris, que pretende enseñar a la infancia el respeto a las minorías étnicas, religiosas y sexuales, ha provocado la expulsión de los miembros directivos del distrito de Queens y ha extendido la controversia a otras escuelas.Esta no es la primera vez que la inclusión de asuntos sobre lesbianas y gays provoca enfrentamientos en las escuelas de Estados Unidos, pero sí es la primera ocasión en la que se destituye a la dirección de un distrito escolar por esta controversia.

La presidenta del consejo que acaba de cesar, Mary A. Cummins, ha asegurado que seguirá luchando contra el plan y que llegará tan lejos como sea necesario. Cummins había desplegado una amplia campaña de desprestigio contra la iniciativa educativa y la había calificado como una "peligrosamente confusa propaganda de la homosexualidad", hasta el punto de describirla como una iniciativa de control de pensamiento "orwelliana" para apoyar la sodomía.

'El compafiero de papá'

Las escuelas que no se han resistido a la propuesta del concejal de educación, Joseph Fernández, están instruyendo a los niños para que acepten con naturalidad las distintas inclinaciones sexuales. Con cuentos como El compañero de habitación de papá y Heather tiene dos mamás, los niños aprenden a respetar a las parejas no convencionales con niños, unos cuatro millones de hogares norteamericanos.Tras la guerra moral desatada en las escuelas, se están analizando públicamente los efectos que puede tener en los niños ser criados por parejas de homosexuales. Mientras que, durante años, los jueces se han resistido a dar la custodia de los hijos a los homosexuales, por creer que podía afectar al desarrollo de los niños, las últimas tesis apuntan a que ser criado por un gay o una lesbiana no provoca desventajas significativas en la educación.

Uno de las tesis más completas es la de la psicóloga de la Universidad de Virginia, Charlotte Patterson. Según ella, los niños criados en este tipo de ambientes no sufren confusión sexual ni se diferencian básicamente del resto, aunque los criados por lesbianas tienen mayor facilidad para expresar los sentimientos de rabia y miedo, así como el de satisfacción.