El Parlamento francés aprueba tres proyectos de ley sobre bioética
La Asamblea Nacional francesa aprobó ayer tres proyectos de ley relacionados con la bioética y cuyos principios básicos son la no comercialización del cuerpo humano, los límites para su utilización médico-científica y las reglas a seguir cuando interviene la informática. El proyecto de ley sobre el cuerpo humano, que modifica el actual Código Civil, obtuvo 451 votos a favor, 44 en contra y 51 abstenciones.Ahora el Senado deberá ratificar dichas aprobaciones para que luego sean las dos cámaras reunidas las que eleven los proyectos a categoría de ley. Dada la rapidez con que evoluciona la medicina, los diputados añadieron una cláusula por la cual se comprometen a revisar la ley cada cinco años.
La última sesión permitió precisar una serie de cuestiones referidas a la la Procreación Médicamente Asistida (PMA). Sólo se admitirá entre parejas heterosexuales, vivas y en edad de procrear. Es decir, se desautorizan los embarazos de mujeres menopáusicas, pero también los hijos nacidos del embrión o del semen de un padre fallecido: "El objeto exclusivo de este progreso científico es paliar la esterilidad y no el dar a luz huérfanos", dijo uno de los diputados de la oposición. Otro aspecto abordado era el de un "riesgo importante de transmisión de una enfermedad particularmente grave e incurable", circunstancia que también autoriza a recurrir a la PMA.
Se pone un límite a la congelación de embriones -cinco años-, de la misma manera que también queda limitada la extracción de órganos en personas vivas "al interés terapéutico del receptor, tras el consentimiento explícito del donante y en beneficio exclusivo de un miembro de su familia directa". El texto prohíbe también la extración de órganos a un menor, a excepción del caso de médula ósea, y sólo en beneficio del hermano o hermana del donante. Con estas medidas se intenta evitar toda degeneración comercial.
En cuanto al diagnóstico prenatal, sólo podrá intervenirse para tratar una enfermedad en el interés del niño que va nacer, con el fin de evitar la utilización de fetos como cobayas.
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