Vergüenza política

"Me sonroja la politización que se está haciendo del asesinato de Lucrecia", afirma la consejera de Integración Social, Elena Vázquez. "Es un espectáculo poco gratificante, que obedece a la mala conciencia que hay respecto al problema", añade el director general de Migraciones, Rairriundo Aragón Bombín. "Más allá de la gresca protagonizada por PSOE y PP, se trata de buscar soluciones urgentes".Elena Vázquez mantuvo ayer una reunión con las cuatro asociaciones de inmigrantes dominicanos. En ella se acordó, como primera medida, buscar otros alojamientos para el medio centenar de caribeños que aún viven en la discoteca y la veintena que albergan en otro chalé abandonado de Aravaca.

La promesa no es nueva. El delegado del Gobierno ha prometido locales antes y después del asesinato de Lucrecia que aún están por llegar. La solución del Gobierno regional no promete ser tampoco para mañana mismo. "Intentaremos que el Inserso se haga cargo de los que tienen petición de asilo o refugio y ayudaremos a buscar piso, ofreciendo un seguro al casero, a los que son emigrantes legales", explica Vázquez. "De los ¡legales no podemos ocuparnos", reconoce. El Ministerio del Interior parece el único estamento de la Administración con competencias, generalmente expulsatorias, sobre los clandestinos. No obstante, desde la consejería se intentará ponerlos en contacto con organizaciones no gubernamentales dedicadas a ayudar a estos grupos.

El Gobierno regional, según Elena Vázquez, quiere acelerar la integración de los inmigrantes bajo una premisa: evitar los guetos. "Los problemas principales son vivienda e inseguridad jurídica", afirma la consejera. El presupuesto es corto: unos 30 millones de pesetas para avalar el alquiler de pisos por los inmigrantes y otros siete millones para dos cursos de formación como agentes sociales de una cuarentena de estos inmigrantes.