El Consejo Seguridad refuerza el bloqueo naval contra Yugoslavia

El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó ayer una resolución que fortalece el embargo contra la nueva Yugoslavia (formada por Serbia y Montenegro) mediante un boicoteo marítimo en el Adriático y fluvial en el Danubio. La nueva resolución intenta impedir el contrabando de mercancías, y evitar así, como viene ocurriendo, que se viole el vigente embargo dictado contra la nueva Yugoslavia dictado por las Naciones Unidas.La resolución, aprobada por 13 votos a favor y las abstenciones de China y Zimbabue, autoriza a los Estados el empleo de "todas las medidas necesarias" para que sus exportaciones no entren en Yugoslavia, y para inspeccionar y verificar las cargas y destinos del transporte marítimo hacia la región o desde ésta.

Por otra parte, la villa de Turbe, a cinco kilómetros escasos de la histórica ciudad musulmana de Travnik, en el centro de Bosnia, fue escenario ayer de terribles combates y fue constantemente bombardeada por los serbios. "Los enfrentamientos han sido terribles y se anuncian todavía peores", señaló el comandante bosnio Sead Zolota.

En otros puntos de Bosnia-Herzegovina se libraban ayer violentos combates entre las fuerzas serbias y croata-musulmanas. La ciudad de Bihac, musulmana en un 67% y bajo asedio serbio desde el pasado agosto, fue sometida durante toda la jornada a un intenso bombardeo de artillería, que según Radio Zagreb, es la respuesta de las fuerzas serbias a Ios "reveses militares e importantes pérdidas" sufridos en los últimos días.

'Cascos azules' heridos

Tres soldados rusos de las fuerzas de la ONU resultaron heridos, dos de ellos gravemente, el domingo por la explosión de una mina antipersonal en la localidad croata de Nijemci, según informó ayer un portavoz de los cascos azules en Belgrado.

Sarajevo vivió una noche relativamente tranquila, salpicada de disparos esporádicos de armas ligeras en algunos barrios. El comandante de las fuerzas de la ONU en Bosnia, general Philippe Morillon, se reunió en Sarajevo con responsables militares de las tres partes beligerantes para intentar por enésima vez un alto el fuego. El último entró en vigor por unas horas el jueves.

Morillon dio cuenta de las repetidas violaciones de la última tregua y de los movimientos de tropas en varios puntos de la antigua república yugoslava y citó informaciones procedentes. de Gradacac, en el Norte; de Maglaj y Turbe, en Bosnia central; y Mostar, en el Sur. El comandante de los cascos azules subrayó la necesidad de aumentar los grupos de observadores desplazados en toda Bosnia.

El protagonista de la guerra estuvo ausente en la reunión de Sarajevo. El máximo líder militar de los serbios, el general Ratko Mladic, rehusó cubrir el corto recorrido desde su cuartel general en Pale, al este de Sarajevo.