_
_
_
_

En el umbral de los 20 duros

Los operadores españoles se resisten a poner la gasolina 'súper' a 100 pesetas el litro

Miguel Ángel Noceda

El precio de la gasolina súper -utilizada por casi el 90% de los usuarios españoles- está a punto de alcanzar las 100 pesetas. Para los 14 próximos días, a partir de mañana, se ha fijado en 99,20, aunque podría elevarse hasta 100,50, que es el máximo permitido legalmente por la Administración. Sin embargo, en estos momentos en que la gasolina se halla en el umbral de marcar un hito histórico llegando a las 100 pesetas sigue habiendo muchas sombras en el sistema de precios establecido. A las empresas Repsol, CEPSA y BP Oil España se les acusa de actuar en oligopolio al ponerse de acuerdo al fijar el precio de venta al público y al Gobierno de ejercer un férreo control sobre estas empresas.

Más información
Precios máximos en 'libertad'

Tenía que ser en 1.992. Es casi seguro que este año de fastos también pase a la historia por otra razón: el litro de gasolina llega a las 100 pesetas. De momento está en 99, pero desde mañana, martes, los operadores que ex penden gasolinas ya podrían vender la súper por esa cantidad, aunque sin rebasar nunca el techo que fija el precio máximo que el Ministerio de Industria anuncia cada 14 días. Para la gasolina súper (de 97 octanos) es de 100,50 pesetas. Los otros combustibles (gasolinas normal y sin plomo, gasóleos y fuelóleos) están por debajo.Campsa, cuya decisión rige para el resto de los operadores, ha Fijado el precio de venta al público en 99,20 pesetas en un alarde de malabarismo para evitar llegara las 100 pesetas y esquivar el efecto psicológico que supone para el usuario alcanzar esa barrera. La compañía distribuidora no ha tenido reparos en poner una fracción de 20 céntimos de la que no existe moneda. Es posible que en la siguiente quincena para la que se espera otra subida de los precios máximos como consecuencia de que el dólar ha continuado al alza, vuelva a sor prender con otra subida similar con tal de no llegar a los 20 duros.

¿Quién fija el precio?

El precio de venta al público lo fija, en teoría, el operador de la gasolinera a su gusto. Es decir, las gasolineras pueden tener precios distintos, pero siempre por debajo del máximo fijado. Sin embargo, no ocurre así. En la actualidad hay dos grupos de gasolineras: las 4.000 de la antigua red concesionaria del monopolio y las que se han construido tras comenzar, la liberalización del sector en la denominada red paralela. Las concesionarias ponen sus precios según los que marca Campsa (compañía participada por Repsol, CEPSA y BP Oil). Aunque no existe nada escrito que obligue a que sigan los precios que fija Campsa, se mantiene la obligación de actuar como una red concesionria hasta que se apruebe la ley deadaptación al monopolio, prevista para primeros de diciembre. Después, ya se verá.

Las gasolineras de la red paralela, donde los tres accionistas de Campsa tienen 566 de los 783 establecimientos que funcionan, pueden poner los precios que quieran sin estar sujetas a esa obligación de la red concesionaria. Sin embargo, existe un pacto de no agresión entre Repsol, CEPSA y BP Oil y ponen los precios de Campsa. Los otros operadores también siguen el precio de Campsa, que marca una rentabilidad bastante factible.

Las tres socias de Campsa copan más del 90% de las gasolineras que hay en España. En concreto, Repsol supera el 60%; CEPSA (con Ertoil), el 25%, y Bp Oil España (antigua Petromed), el 8%. "Esta circunstancia les permite controlar el mercado sin problemas y no variar el precio", según una fuente del sector, que se queja de que el mercado se encuentra en una situación oligopolística. "Si de verdad existiera competencia, habría gasolineras con dos e, incluso, cuatro pesetas menos que Campsa". "Lo que ocurre", prosigue, "es que a los pocos que lo han intentado hacer, como alguna cadena de hipermercados, se le han denegado nuevos permisos". Este extremo ha sido negado rotundamente por fuentes de la Administración.

La mejor forma de introducir una verdadera competencia en el mercado sería que una de las dos empresas minoritarias (CEPSA o BP Oil) decidiera cambiar el precio. Sin embargo, fuentes de una de estas dos empresas deja las cosas claras: "Existe, una disciplina entre los socios que, al menos de momento, no estamos dispuestos a romper". La misma fuente comenta que ese pacto beneficia también a los operadores minoritarios, "ya que si redujéramos el precio nos acusarían de que les estamos echando del mercado al jugar a la baja".

Este pacto interno supone una práctica contra la competencia, según un experto en estos temas, que subraya: "Desde el punto de vista doctrinal no hay cosa peor que acordar precios". Fuentes del Tribunal de la Competencia español han manifestado que nadie ha presentado una denuncia y reconocen que es un caso típico de anticompetencia, "aunque habría que probar si es verdad que existe acuerdo". En parecidos términos se han expresado fuentes de la CE.

Privilegios

En la actualidad cualquier multinacional puede abrir una gasolinera en España. Sin embargo, según un medio del sector, "las multinacionales no han podido acceder a la antigua red concesionaria por lo que han tenido que abrirlas nuevas a coste muy alto y no les interesa alejarse del precio que fija Campsa porque tienen poco volumen y no podrían rentabilizar la inversión".

Fuentes ligadas al Ministerio de Industria rechazan rotundamente que exista el privilegio para las empresas españolas y afirman que el sistema de precios máximos evita que haya un predominio oligopolístico, ya que no permite rebasar un techo. "De existir el sistema de precios libres que hay en otros países europeos, las tres empresas que dominan el mercado español podrían disparar los precios hasta donde quisieran sin tope y todos las seguirían". Según esta fuente, esta es la razón por la que se mantendrá el sistema de precios máximos que, además de España, está implantado en Bélgica, Portugal, Grecia e Irlanda.

La posibilidad de que el precio de venta al público de la súper se eleve a 100 pesetas es remota. "Es difícil imaginar que el Gobierno, ante la presión que tiene por diversos frentes, permita que Campsa suba el precio a 100 pesetas", dice una de las fuentes consultadas. El impacto de pasar de 99 a 100 pesetas sería mucho más fuerte que pasar de 95 a 99, dice esa fuente. Este precio, en cualquier caso, es de los más baratos de la CE (véase cuadro).

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Miguel Ángel Noceda
Corresponsal económico de EL PAÍS, en el que cumple ya 32 años y fue redactor-jefe de Economía durante 13. Es autor de los libros Radiografía del Empresariado Español y La Economía de la Democracia, este junto a los exministros Solchaga, Solbes y De Guindos. Recibió el premio de Periodismo Económico de la Asociación de Periodistas Europeos.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_