En un barrio de Madrid
Se llama Carmen y es mi vecina. Vive frente a mi casa, en el mismo barrio. Somos vecinas, pero su casa y la mía son muy diferentes. Mi casa está rodeada por un jardín y tiene ascensor, garaje y calefacción central; la casa de Carmen es una tienda de campaña deshilachada, rodeada de basuras y escombros que un camión del Ayuntamiento amontona todos los días y nunca se lleva.Me visita a menudo, pero no para tomar café, sino para pedirme comida y ropa para sus hijos. El mayor tiene tres años, pero aparenta uno; la pequeña, Pilar, tiene un año, pero parece un bebé de pocos meses.Ayer, Pilar traía una bolsa de plástico por pañal y la frente ardiendo; había estado toda la noche vomitando, mientras la intensa lluvia mojaba su casa de tela. Su joven madre me pidió una aspirina, leche y algún panal. Mañana se tienen que marchar, les echan del barrio, no saben adónde ir, sólo quieren un sitio donde poder vivir, aunque sea una humilde chabola de cartón.
Carmen es gitana, yo soy paya.
Madrid, Capital Cultural distrito de Ciudad Lineal, España 1992.-
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