El juez ordena detener al ex presidente de Bacoma por el fraude de Enatcar
El juez de delitos monetarios de la Audiencia Nacional, Miguel Moreiras, ha ordenado la busca y captura de Fernando Calvo, ex presidente de Bacoma, filial de la empresa pública Enatcar, investigada por una supuesta malversación de 560 mllones de pesetas en la compra de autocares con facturas falsas.
Fuentes de la Audiencia Nacional explicaron que Fernando Calvo se encuentra en situación de rebeldía por este sumario, en el que, entre otras irregularidades, se investiga la compra, cuando Bacoma era presidida por Fernando Calvo, de 80 autocares, por cada uno de los cuales Enatcar pagó casi 30 millones de pesetas, cuando valían 23 millones. Los autocares se adquirieron para uso de Enatcar y otra de sus filiales a través de la Compañía de Transportes del Mediterráneo (CMT). Los autobuses fueron vendidos por Mercedes-Benz y carrozados por Irizar.La diferencia entre el precio realmente pagado a Mercedes-Benz e Irizar y el precio de adquisición se cargó en la contabilidad de CMT, filial de Bacoma, y se articuló mediante facturas falsas emitidas por Ángel Teruel Urbaneja, que se las entregó a Fernando Calvo. Las fuentes consultadas indicaron que la compra fue aprobada y decidida por Rafael Ortega Martín, presidente de Enatcar hasta octubre de 1989, y por Calvo.
El juez preguntó el pasado lunes sobre este asunto al secretario de acción sindical de UGT, Apolinar Rodríguez, que fue presidente de Bacoma hasta diciembre de 1986 y luego miembro del consejo de administración de la misma, aunque declaró que no tiene relación con el asunto y quedó en libertad sin fianza.
El juez investiga también si el pago de 14.560.000 pesetas por parte de Enatcar a la Fundación para el Desarrollo del Cooperativismo y la Economía Social (Fundescoop), de UGT, corresponde a un informe existente o si fue una ayuda al sindicato, como declaró Julio Soto, ex presidente de Enatcar. Las fuentes de la Audiencia manifestaron que Soto comunicó al Consejo de Enatcar cuando era presidente que nadie sabía nada de ese informe, pues ni se encontraba en Enatcar ni constaba su pedido.
