_
_
_
_

Presos e innombrables

La sensación de derrota se ha traducido, indican fuentes de la lucha antiterrorista, en que en la veintena de reservistas que tenía la banda en Francia se han detectado huidas a Latinoamérica. El desánimo también ha cundido entre los presos de ETA, según fuentes penitenciarias.El atentado de Oiartzun, que puso fin al espejismo de una tregua, causó hondo malestar entre sus presos menos duros, que no ocultaron a sus interlocutores que veían alejarse una vez más una salida a su situación y el derrumbe del año mágico. El hecho de que el Gobierno no haya excarcelado aún a los presos más emblemáticos de esta línea, Isidro Etxabe y Juan Antonio Urrutia, casi un año después de la difusión de sus duras críticas a la dirección etarra, también actúa como freno para que decidan acogerse a esta política decenas de reclusos, según fuentes conocedoras de este proceso. En sentido contrario, persiste un núcleo duro que aún jalea las gestas armadas y ve al Estado contra las cuerdas.

Más información
El fracaso de la "ofensiva coyuntural" de 1992 obliga a ETA a buscar nuevas vías de lucha

El peso de las decisiones reside hoy en media docena de elementos civiles del entorno de KAS -unos conocidos y otros desconocidos, todos ellos innombrables, porque las investigaciones en marcha no se han traducido aún en pruebas irrefutables- que desde España actúan en nombre de la cúpula de ETA detenida en Bidart, y que dirigirían a los mandos etarras operativos ocultos en Francia, según fuentes antiterroristas. Esta explicación echa por tierra el valor que suele atribuirse a la media docena de nombres que suelen citarse como etarras buscados en Francia como susceptibles de tomar las riendas de Pakito. Son meros operarios: unos mandados.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_