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El profesional

Miquel Roca demostró ayer el porqué de su reconocida fama como político profesional. Subió por primera vez -y única en este congreso- al atril reservado a los oradores y dejó en su asiento no sólo su documentación como congresista, sino también buena parte de sus postulados políticos. Sobre todo aquellos valores que proyectan de él un perfil de dirigente capaz, al mismo tiempo, de compaginar su nacionalismo con un mayor compromiso del partido en la política española. Fue, en ese aspecto, un discurso lleno de renuncias.Roca habló a los delegados utilizando el lenguaje más pujolista y puso el acento de su discurso en los valores políticos y morales más íntimos del presidente de la Generalitat. "Cataluña es nuestra razón de ser; por eso nunca nos parece bastante lo que hemos hecho", afirmó en un pasaje de su intervención. Antes había saludado "con entusiasmo" la libertad de los países bálticos, y saludó "con alegría" la creación de los nuevos estados de Eslovenia, Croacia y Macedonia. Y había pedido a los delegados que del congreso saliera "la voz indignada de un pueblo, el catalán, que se rebela contra la hipocresía europea que anatemiza los nacionalismos que nacen de la libertad y defiende los nacionalismos que se han impuesto por encima de la libertad de los otros".

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No fue Roca quien habló a los delegados, sino Pujol. El secretario general sólo puso la voz y abrió así formalmente un congreso cuyo principal interés está en lo que sucede fuera de. las salas donde se debaten las" ponencias. Allí juegan Pujol y Roca su particular envite, tildado por el presidente del Parlament, el democristiano Joaquim Xicoy, de "partida con las cartas marcadas".

Tándem

En una ocasión sí fue espontáneamente sincero el secretario general: cuando se deshizo en elogios hacia su secretario de Organización, Josep Caminal, el único -además de Pujol y el fallecido Ramon Trias Fargas- al que citó por su nombre. A Caminal y su tozudez en no dejar el área de Organización -llegando incluso a molestar con su determinación a Pujol- deben los delegados que el tándem Roca-Pujol aún se pueda volver a recomponer. Y que a partir de mañana el presidente de CDC pueda administrar con generosidad, si quiere, los resultados del congreso.Nadie diría, por lo oído ayer, que Roca está cansado de la permanente ambigüedad del partido en política española; mucho menos que existan diferencias con Pujol, al que reiteró su lealtad. La interpretación de Roca fue modélica en este sentido, quizás preludio de un próximo adiós',' ya que su trabajo fue el que se espera de un abogado que defiende hasta el final a su cliente. Roca demostró que es un. profesional. El profesional: con mayúsculas.

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