Retirada entre silbidos la enmienda promovida por un hijo de Pujol en el congreso de Convergencia

La enmienda apadrinada por Jordi Pujol Ferrusola, hijo mayor del presidente de la Generalitat, que trataba de evitar compromisos globales de CDC en la gestión del Gobierno de España concluyó su camino siendo retirada ante el temor a una apabullante derrota y con el silbido de muchos de los presentes en la comisión que debatía la ponencia de estrategia política. Sin embargo, como previó el presidente de CDC, la enmienda ya había cumplido su objetivo: enrarecer el ambiente del partido en contra de Miquel Roca, que hoy no se presenta a la reelección como secretario general de CDC.

Jordi Pujol Ferrusola, pese a ser delegado en el congreso, no apareció por la comisión que debatía la ponencia política, ausencia que motivó que recibiera en los pasillos críticas de muchos de los presentes.Quienes sí estaban era la plana mayor de los dirigentes de Convergéncia Democrática, a excepción del presidente del partido y del secretario de Organización, Josep Caminal, y encabezada por el propio Roca. La enmienda fue presentada por Lluís Arboix, de la agrupación de Sarriá-Sant Gervasi, que se limitó a leer un texto en el que afirmaba que, una vez celebrados los debates correspondientes en las diferentes agrupaciones locales, la retiraban. Lo mismo hizo con una enmienda transaccional que pensaban ofrecer a los ponentes y que proponía dejar en manos del Consejo Nacional la participación de los nacionalistas en el Gobierno central.

Dos versiones

La postura de los defensores de la enmienda fue acogida con siseos acompañados de protestas y silbidos varios presentes resumieron, ante la prensa, este clima con la palabra "abucheos"- por parte de los presentes, molestos porque tenían el convencimiento de que se había presentado con la única intención de agitar al partido contra Roca.

En nombre de la dirección, habló en comisión el' consejero de Economía, Maciá Alavedra, que pese a agradecer la retirada de la enmienda quiso dejar claro que habría votado en contra y que los parámetros que defendía eran rechazados de plano.

El propio secretario general saliente explicó, después de la conferencia de prensa de Alavedra, detalles que éste no había ofrecido y que dejaban en mal lugar a los defensores de la enmienda. Roca dio por supuesto que la causa de la retirada era que hubiera sido objeto de una rotunda votación en contra por parte de los delegados. "Hubiera tenido cinco votos", dijo taxativamente. Luego rebajó el cálculo a cuatro cuando le recordaron la ausencia del hijo de Pujol.

La retirada de la enmienda es un triunfo de Roca. A Roca se le notaba mucho más relajado y sin la responsabilidad de tener que controlar. férreamente, por primera vez, el desarrollo del congreso del partido en el Gobierno. Ese escaso control de los delegados por parte de la dirección hace que la elección de los 40 miembros del Consejo Nacional-delos más de 300 que componen el máximo órgano de dirección entre congresos- que serán elegidos hoy sea toda una incógnita al haber fracasado, al menos hasta anoche, las negociaciones para consensuar una lista de compromiso como en anteriores asambleas de CDC. Ello provocó que los 84 candidatos persiguieran personalmente el voto entre los delegados.

Por la mañana, Miquel Roca, secretario general saliente de Convergéncia Democrática de Catalunya, sentenció ante el IX congreso que el nacionalismo moderado que representa CDC nunca se dejará encasillar como apéndice de los grandes partidos españoles. "Quienes lo pretenden", dijo, "ignoran que nosotros no estaremos nunca ni con éstos ni con aquéllos, sino con nosotros rnismos". Así, Roca asumía como propia la posición genuina del pujolismo, que rechaza compromisos permanentes con otras fuerzas fuera del ámbito catalán. El número dos de CDC advirtió que si el Gobierno socialista no cambia su política económica, "la soledad será el testimonio de su fracaso", pero no cerró puertas a futuros acuerdos.

Los 1.465 congresistas, puestos en pie, premiaron el discurso de Roca con dos minutos y medio de aplausos. El secretario general saliente abordó todos los aspectos de la vida del partido de la forma que más podía gustar a su audiencia.

Satisfacción de Pujol

Para especificar el rechazo a alinearse junto al PSOE o el Partido Popular (PP), dijo: "No coincidimos ni. con Martín Villa ni con Rodríguez Ibarra, lo que es bastante clarificador; y, si se me permite, ni ganas". Pujol manifestó su satisfacción por el discurso de Roca salvo en su renuncia, que Roca achacó a las difíciles relaciones con Unió.

Roca concluyó su intervención con una triple reafirmación, destinada, subrayó, a evitar interpretaciones erróneas de su abandono de la secretaría. "Convergéncia es y será siempre mi partido" fue la primera. "Serviré con lealtad a la coalición CiU", la segunda. "Seré fiel al presidente Pujol como lo he sido siempre", la tercera.

En las ponencias que se debaten en el congreso de CDC, ha sido aceptada una enmienda que propugna una ya vieja formulación de Convergència: la fusión con Unió Democrática, su socio electoral desde 1979 en la coalición CiU. Los democristianos la rechazan de plano porque sería una simple absorción, señalan.

En su discurso, Roca afirmo que a Convergencia también le había llegado "el aliento del ataque sectario" sobre el tema de la financiación de los partidos. "No participaremos en este juego" concluyó.