Caída general en las bolsas internacionales
Las bolsas de todo el mundo volvieron a registrar ayer importantes descensos ante la ausencia de novedades en el entorno económico. La debilidad de los mercados de divisas y su aparente descontrol están una vez más detrás de estos retrocesos, aunque los mercados dan nuevas muetras de nerviosismo dejándose arrastrar unos por otros. La única novedad de la jornada fue la puesta en marcha en Wall Street del sistema electrónico de protección de precios ante el cariz que tomaba la situación. Poco después de abrirse ese mercado el índice Dow Jones perdía 104 puntos y ponía a prueba el soporte del 3.100, cuya ruptura puede abrir un foso cuyo fondo está en el 2.850, informa Rafael Vidal.Los analistas achacan esta nueva corriente de ventas tanto a la situación global de los mercados como a la incertidumbre política y económica que padecen los Estados Unidos aunque, en un terreno más concreto, la desviación de fondos desde la renta variable hacia los bonos aparece como una causa mucho más creíble. Tras pararse el mercado durante algunos momentos, se impuso la calma y el Dow Jones perdía tan sólo 21,61 puntos, lo que le permitía mantenerse por encima del 3.150, informa José Miguel Larraya.
Cronológicamente, Tokio fue el primer mercado en marcar la pauta bajista y los analistas achacan ese retroceso, el séptimo consecutivo, a la falta de confianza de los inversores. El Nikkei llegó a perder el nivel del 17.000 pero la entrada de fondos públicos salvó la situación limitando la caída a 222 yenes.
Las bolsas europeas siguen teniendo como eje de su evolución a los mercados de divisas, aunque la propia debilidad y la ausencia de confianza hace que cualquier situación influya en ellas con fuerza. Londres bajaba un 2,5% durante toda la mañana ante un nuevo retroceso de la libra esterlina, pero fue la apertura a la baja de Wall Street la que agudizó la corriente vendedora e hizo perder al índice FT-100 un 4,06%, 103 puntos, el nivel más bajo desde 1987, informa Enric González. París se dejó llevar por las circunstancias y bajó un 4,3%, mientras que Francfort reflejaba la debilidad general con un retroceso del 3,63%.
La bolsa española tampoco fue ajena a este descenso general y cedió un 3,65%, 6,8 puntos, que sitúa el índice de Madrid en el 179,48%. Barcelona bajó 5,85 puntos, Bilbao 4,65 y Valencia 7,16. Esta nueva caída tiene como base la debilidad general de los mercados de valores y la inestabilidad de las divisas.
