Brasil: la fuerza de una democracia

La destitución del presidente Fernando Collor, acordada por el Parlamento brasileño, pone de manifiesto la fragilidad y la fuerza de la joven democracia brasileña. ( ... )En un país inmenso, de 154 millones de habitantes, las reglas del juego político son todavía balbuceantes. Fernando Collor era el primer presidente elegido por sufragio universal. Su programa se basaba en tres fórmulas: atajar la inflación; el retorno de su país a las reglas del juego de la economía mundial, y, sobretodo, la lucha contra la corrupción. Ni ha controlado la inflación ni ha mantenido su imagen de hombre íntegro. ( ... ) No existían más que dos opciones: la dimisión del presidente o su destitución. ( ... )

Esta decisión radical demuestra, por el contrario, que la democracia brasileña es capaz de resistir. ( ... ) En otros tiempos se hablaría del posible retorno al poder de los militares. Hoy, ni se cuestiona. Se aplica la Constitución, y el vicepresidente interino, Itamar Franco, asegura la sucesión en el poder.(...) Por el momento, las manifestaciones gigantescas que han desfilado por las calles saludando la marcha de Collor no han cuestionado el mecanismo de sucesión. Inmenso Brasil, grande como un continente, que, después de más de un siglo, anuncia su ascenso próximo al club de los grandes. ( ... ) En todo caso, ha dado una lección a todos los jefes de Estado. (...)

1 de octubre