"¿Es una chica o un portero bajito?"

Manon Rheaume, una canadiense menuda de 20 años, ha roto la última barrera sexual que quedaba en el deporte. Y lo hizo el miércoles pasado en Florida, en un encuentro de pretemporada de la Liga profesional de hockey sobre hielo.Rheaume inició el partido en la portería y se convirtió en la primera mujer en competir con los hombres en una liga profesional. Guardameta experimentada desde los cinco años, Rheaume jugó 20 minutos y encajó dos goles. La impresión que dio le basta para asegurarse una plaza en el equipo de su club, el Tampa Bay Lightning.

Es posible que Rheaume sea la revelación de la temporada. 'Según los expertos, su ascenso a la National Hockey League es cuestión de tiempo. "¿Por qué no? Ni siquiera me daba cuenta de que era una mujer. Parecía un guardameta bajito. Esta Liga está repleta de porteros bajitos", dijo, Ron Caron, gerente del Saint Louls Blues, el rival de Tampa Bay en este partido histórico, ganado por Saint Louis por 6-4.

Rheaume, natural de Lac Beaúport, en las cercanías de la ciudad de Quebec, mide 1,68 metros y pesa 62 kilos. Sus dimensiones la hacen la jugadora más diminuta de la NFIL, pero juega en una posición donde la talla se mide por sus nervios, reflejos, agilidad y corazón. Rheaume, una mujer de cabello largo, ojos grandes, nariz aguileña y facciones elegantes, ya hizo historia el año pasado. al ser la primera mujer en jugar en la Primera División de la Liga canadiense. En su primer partido, un disco se estrelló contra su máscara y le causó una profunda herida en la ceja, pero Manon se negó a abandonar la cancha.

"Empezó a correr la sangre, pero continué jugando. No quería que nadie me acusara de abandonar el partido por ser mujer", dijo Rheaume.

"Sería un mentiroso si dijera que no utilizo a Rheaume para publicidad", afirmó Phil Expósito, presidente y gerente del Lightning, uno de los dos equipos nuevos que ingresan en la Liga esta temporada. "Pero no me importa nada el hecho de que sea mujer. Si tuviera un caballo que supiera caminar y parar un disco también estaría jugando en la portería agregó.

Rheaume fue titular de la selección canadiense que conquistó el mundial femenino a principios de año. Su éxito es el fruto de casi toda una vida en una portería. Su padre, Pierre, un contratista de profesión, también dirigía la pista de hielo de su pueblo y era el entrenador del equipo de sus dos hermanos. Rheaume aprendió a patinar a 'los tres años y debutó como guardameta dos años más tarde, cuando a su padre le faltó un jugador en un torneo. "Le dije a mi padre: 'Quiero ser tu guardameta", recuerda ella. "Comenzó a reírse. Entonces respondió: '¿Por qué no?'. Haces lo mismo en casa con tus hermanos".

Como toda niña canadiense, Rheaume también hizo ballet, esquí y hasta un poco de béisbol, pero ya a los 12 años sabía su futuro. "El hockey no era solamente un deporte. Era mi pasión", afirmó. Rheaume nunca tuvo problemas de discriminación hasta los15 años, cuando ingresó en la división inferior de las Ligas juveniles. Los jugadores intentaron desalentarla lanzándole los discos a la altura de la cara.