El Gobierno integrista de Sudán, acusado de emprender una 'limpieza etnica'

La organización humanitaria británica Africa's Watch pidió ayer a Naciones Unidas que investigue la limpieza étnica que el Gobierno integrista sudanés está llevando a cabo con los habitantes nuba, población no árabe y predominantemente cristiana, que habita en las montañas del Estado de Kordofán, en el centro del país.En un informe de siete, páginas, Africa's Watch afirma que a los nuba, que llegan al millón de personas, se les está obligando a abandonar sus tierras. La organización da detalles sobre el plan que el Gobierno sudanés ha diseñado para realojarlos, y que implica la separación de hombres y mujeres: los hombres serán enviados a trabajar para las grandes granjas comerciales, mientras que las mujeres y los niños servirán a las familias árabes, mayoritarias en el norte y en el centro del país.

Más de 40.000 nuba han sido ya trasladados en camiones con escolta militar desde sus poblados en las montañas a campamentos situados en Kordofán.

Por este motivo, Africa's Watch ha pedido al subsecretario general de la ONU para Asuntos Humanitarios, Jan Eliasson, quien viajará a Sudán este mes, que visite la zona y solicite el acceso a la misma de organizaciones humanitarias y de diplomáticos y medios de comunicación.

El informe señala que el territorio de los nuba se convirtió en zona de guerra en 1987, cuando los rebeldes del Ejército de Liberación del Pueblo Sudanés (SPLA), procedentes del sur del país, de mayoría cristiana y animista, penetraron en las montañas dentro de una amplia ofensiva en la guerra civil que arrasa Sudán.

El pasado enero, los gobernadores provinciales de Kordofán declararon la guerra santa en las montañas Nuba, para liberar la zona. La campaña ha incluido masivas detenciones y asesinatos de hombres nuba sospechosos de simpatizar con el SPLA, destrucción de los pueblos y cierre de servicios sociales.