La Iglesia ya recomendó en 1991 el apoyo a opciones políticas "de confianza"

La Conferencia Episcopal ya recomendó en 1991 orientar "el voto hacia las alternativas que merezcan más confianza ante la vida en general" durante la presentación del documento sobre el aborto hecho público en abril del año pasado. Javier Martínez, obispo auxiliar de Madrid, no quiso entonces concretar qué opciones políticas son, a juicio de la Iglesia española, las que "merecen más confianza".El obispo Martínez, no obstante, comparó el aborto a un genocidio similar al de los campos de exterminio nazis. Propuso rescatar el debate sobre el aborto del terreno político para trasladarlo a otro foro "más desinteresado", argumentando que "la política partidista invade todos los ámbitos de la vida humana, hasta el punto de amenazar de asfixia a la sociedad".

El aborto. 100 cuestiones y respuestas sobre la defensa de la vida humana y la actitud de los católicos hacía un llamamiento a los médicos para que hicieran valer la objeción de conciencia.

En junio del año pasado, el Papa envió una carta al episcopado de todo el mundo haciendo un llamamiento para emprender una cruzada y una movilización general de toda la Iglesia contra las leyes a Pavor de la interrupción del embarazado y de la vida en su estado terminal. Aquella carta fue interpretada como una orden para que los obispos no permitan que los parlamentos aprueben leyes en favor del aborto.

Sin embargo, la Conferencia Episcopal española mantenía hace sólo siete meses una inquebrantable cautela acerca del nuevo Código Penal que estaba elaborando el Gobierno. Medios eclesiásticos justificaron la prudencia de los obispos en relación con el proceso de negociación que Iglesia y Estado tenían sobre el impuesto religioso.

El director general de Asuntos Religiosos, Dionisio Llamazares, declaró en agosto del año pasado que "pretender que una norma ética de un determinado colectivo confesional, religioso o no, se convierta en una norma obligatoria para los españoles es algo muy arriesgado".