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La juez francesa responsable de terrorismo interroga en Hendaya a los etarras detenidos

Aurora Intxausti

La juez francesa Laurence Levert y la fiscal Irene Estoler, encargadas de asuntos de terrorismo, interrogaron ayer en Hendaya (Francia) al dirigente de ETA Iñaki Bilbao y a su chófer, Bernardo Mella, detenidos el domingo en Bayona en la operación contra la nueva dirección de la banda terrorista. El tercero de los detenidos, Rosario Picabea, se encuentra internado en el hospital de Saint Léon de Bayona, aquejado de una diabetes aguda. En el traslado desde la comisaría de la Policía del Aire y Fronteras de Hendaya hasta el centro sanitario de Bayona protagonizó un intento de fuga.

El intento de fuga logró ser impedido por los policías que le custodiaban. Bernardette Aguirretxe, la cuarta detenida, quedó en libertad el lunes.El examen de la documentación incautada a Iñaki Bilbao y Rosario Picabea el pasado domingo, tras su detención en Bayona, fue el motivo por el que la juez Levert y la fiscal Estoler se trasladaron ayer de París a Hendaya. Durante tres horas y media revisaron la documentación que tenían los etarras e interrogaron brevemente a Iñaki Bilbao y Bernardo Mella. Ambos fueron trasladados a última hora de ayer a París para prestar declaración ante la juez. Levert. Iñaki Bilbao y Rosario Picabea podrán ser acusados de asociación de malhechores y tenencia ilícita de armas. Ambos etarras estaban armados en el momento de su detención. Bernardo Mella deberá prestar declaración ante la juez por supuesta colaboración con una banda de malhechores. La juez Levert y la fiscal Estoler se reunieron también en Bayona con agentes de la Policía Judicial antes de regresar a París.

El etarra Rosario Picabea se encuentra internado en una habitación del Hospital Saint Leon de Bayona -en el aparcamiento de ese centro sanitario fue detenido el domingo junto a los otros etarras- aquejado de una crisis diabética. En la tarde del lunes fue visitado por un médico en la comisaría, que aconsejó su traslado a un hospital.

Al descender de la furgoneta que le transportó desde la comisaría al centro sanitario, Picabe forcejeó con los agentes qué le custodiaban e intentó darse a la fuga corriendo. Su huida fue frustrada por los policías, que lo inmovilizaron y lo introdujeron en el hospital. Tanto la habitación en la que se encuentra internado como el centro sanitario están fuertemente vigilados por agentes de policía.

Los familiares de Picabea expresaron ayer su protesta por no permitírseles ver al enfermo. Rosario Picabea consiguió huir en julio de 1984, en Hernani (Guipúzcoa), de los agentes de la Guardia Civil que le custodiaban esposado y herido

La documentación encontrada a los etarras es considerada por la policía como de carácter "operativo interno". Entre los papeles figuran escritos de otros miembros de la organización que se encuentran en activo. Debido al puesto que Iñaki Bilbao ocupaba en estos momentos dentro de la cúpula etarra, candidato a ser el suceso de Francisco Múgica Garmendia, Pakito, los documentos encontrados adquieren para jueces y policías dedicados a asuntos de terrorismo mayor relevancia. Hasta la detención de Pakito, el pasado 29 de marzo en Bidart (Francia), Bilbao, Iñaki de Lemona, se había encargado de trasmitir a los comandos de reserva las órdenes de Múgica. Además, el etarra, según declaraciones de miembros de ETA detenidos en España, presenciaba en el chalé Txantxagorria, de Arcangues, propiedad de Martin Harispe, las despedidas de Francisco Múgica a los activistas de su grupo después de entregarles las armas y el dinero.

Detención en Madrid

Por otra parte, agentes del Servicio de Información de la Guardia Civil detuvieron ayer en Madrid a Mikel Urkía, vecino de Orereta (Guipúzcoa), por estar presuntamente relacionado con actividades de ETA. La detención se produjo a las tres de la tarde en la Plaza de Castilla y fue trasladado a la Dirección General de la Guardia Civil, informaron a Efe fuentes oficiales, que no precisaron el grado de presunta implicación del detenido en actividades terroristas.Por su parte, fuentes de la Gestoras pro Amnistía apuntaron en un comunicado que Urkía se había trasladado a Madrid para comparecer ante el juez Baltasar Garzón, sin especificar los motivos.

["Asistimos por una parte a una cierta desmoralización en el mundo del entorno de ETA y, al mismo tiempo, de radicalización y esto se manifiesta tanto dentro como fuera de las cárceles", dijo ayer a Radio Nacional de España José Antonio Aguiriano, delegado del Gobierno en el País Vasco. "Creo", añadió Aguiriano, "que debe de haber una toma de conciencia de que la violencia no tiene sentido y de que este es el momento, de una vez por todas, para acabar con esta lacra que impide la paz, la libertad y el desarrollo del País Vasco".

El delegado del Gobierno en el País Vasco explicó en sus declaraciones a RNE que la eficacia policial en la lucha contra ETA "hace que podamos ser más optimistas sobre el final de la violencia, pero al mismo tiempo debemos ser prudentes porque el fin de la organización terrorista no es previsible de forma inmediata".]

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Sobre la firma

Aurora Intxausti
Coordina la sección de Cultura de Madrid y escribe en EL PAÍS desde 1985. Cree que es difícil encontrar una ciudad más bonita que San Sebastián.

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