La CE aprueba dos planes para defender el automóvil y la aeronáutica ante Japón y EE UU

La Comisión Europea aprobó ayer en Bruselas dos planes para defender el futuro del automóvil y la aeronáutica, dos sectores básicos de la industria en Europa, ante el desafío tecnológico de Japón y Estados Unidos, respectivamente. Se trata de los primeros proyectos que desarrollan el compromiso de mejorar la competitividad de la industria de la Comunidad Europea, asumido por los Doce el pasado 11 de diciembre en la cumbre de Maastricht.

El documento aprobado ayer subraya que el esfuerzo de reconversión le corresponderá hacerlo a las propias empresas, aunque la Comunidad deberá "acompañar los esfuerzos" de adaptación -de la industria automovilística europea a la competencia japonesa. Las ayudas comunitarias irán destinadas esencialmente a investigación tecnológica y a formación de los trabajadores.El vicepresidente Martin Bangemann, autor de la propuesta, se refirió a "la necesidad de introducir nuevos objetivos en el Fondo Social Europeo". A esta idea de detraer fondos destinados a las regiones más pobres, cuando la mayoría de las factorías automovilísticas están radicadas en las zonas más ricas, se oponen los comisarios reponsables de Empleo y formación social, y de Política Regional. El acuerdo entre los Doce en este punto está condicionado al paquete financiero de Maastricht, que no puede a de precios segun Solbes ereales, del 15% en la carne de iacuno y del 10% en la leche, así ~omo un 4% de recorte en la prolucción lechera. La hora de la ~erdad de la reforma y del acuerlo del GATT tendrá que esperar )robablemente a la decisión de os jefes de Estado y de Gobierno le la CE en la cumbre de Lisboa, L finales de junio.

En cuanto a los precios ga-antizados a los agricultores )ara la campaña 1992-93, que ya istá en marcha, Solbes declaró lue "España no puede aceptar nedidas tan negativas". El argunento que da el ministro es que e trata de un año de transiciónnes de unidades en 1991 a 15,1 millones en 1999. Pero estas cifras están garantizadas gracias al acuerdo concluido con Japón para que este país competidor autolimite sus exportaciones a Europa (un máximo de 1,23 millones de coches por año). Durante este período las ventas japonesas incluida la producción de sus plantas en Europa no soprepasarán el 16% del mercado europeo. Los países más sensibles tendrán un cupo máximo de importaciones japonesas, que en España pasará a ser de 79.000 coches al año en lugar de los 45.000 actuales. A partir del año 2000, el mercado será libre, abierto totalmente a las exportaciones.

Las medidas proteccionistas de Bangemann incluyen la prórroga del sistema de distribución a través de concesionarios exclusivos. Este marco excepcional aprobado en 1985 finalizará en 1995, pero Bangemann quiere ampliarlo hasta 1999, fecha en que finaliza el período de transición negociado con los japoneses para limitar sus exportaciones a Europa.

El comisario Leon Brittan, responsable de la libre competencia, ha elaborado un informe en el que se demuestra que los distribuidores aplican precios hasta un 40% más caros según los países. Los consumidores españoles y británicos son los más perjudicados. En España 12 de los 21 modelos más vendidos tenían un precio superior en más de un 30% al del país más competitivo de la CE, cuando los márgenes de variación máximos permitidos son el 12% o hasta el 18% de forma puntual.