El Gobierno vasco rechaza delegar en una comisión la fijación de servicios mínimos

Las competencias de la comisión de arbitraje responsable de establecer los servicios mínimos en caso de desacuerdo entre los trabajadores y la Administración constituyen el principal obstáculo para alcanzar un acuerdo de regulación de huelgas en el País Vasco. Los sindicatos exigen que las decisiones de la comisión sean de obligado cumplimiento, mientras que el consejero de Trabajo del Gobierno autónomo, el socialista Paulino Luesma, defiende que el establecimiento de los servicios mínimos quede en manos de la Administración.Representantes de ELA-STV, UGT y CC OO mantuvieron el viernes en Bilbao una reunión con el consejero para analizar la propuesta realizada el pasado mes por los sindicatos para la regulación de servicios mínimos. Los portavoces sindicales subrayaron que si el departamento de Trabajo no acepta el caracter vinculante de las decisiones de la comisión de arbitraje no habrá pacto para regular las huelgas porque "desnaturaliza el acuerdo alcanzado entre los sindicatos". El acuerdo suscrito por los sindicatos establece en qué sectores es necesario mantener servicios esenciales durante la huelga, y prevé su regulación a través del consenso entre trabajadores y Administración, con la intervención de una comisión en caso de desacuerdo.