Confuso desalojo en el metro por una amenaza de bomba

La compañía Metro de Madrid ordenó a las 9.30 de ayer paralizar las líneas 1 (Plaza de Castilla-Portazgo) y 5 (Aluche-Canillejas) por amenaza de bomba y desalojar los trenes y las 45 estaciones que tienen ambas en total. Sólo media hora antes un atentado segaba la vida del joven Juan José Carrasco. Durante casi una hora el servicio del Metro estuvo parcialmente paralizado. La Jefatura Nacional de Policía calificó la. alarma de "amenaza confusa".El desalojo, sin embargo, fue desigual y motivó la protesta de algunos usuarios, que aseguran haberse quedado en los andenes o en los trenes sin ser informados del riesgo que corrían, como sucedió, según varios viajeros, en la estación de Ventas (línea 5).

Taquilleras y jefes de estación replican que en estas alarmas muchos viajeros no salen, bien por incredulidad o bien para recuperar el importe del billete.

Cesáreo Martín, portavoz de la compañía, asegura que se ordenó el desalojo en todas las estaciones de las dos líneas. Los convoyes de otras líneas que pasaban por las estaciones afectadas recibieron la orden de no detenerse en ellas.

Las versiones de los usuarios y los empleados del Metro sobre el aviso a los viajeros no coinciden en alguas estaciones. En Bilbao, donde confluyen la 1 y la 4, los trenes de la línea 1 no se detuvieron y los viajeros empezaron a acumularse en los andenes. "Los que estábamos en el andén nos enteramos de la amenaza cuando salíamos a la calle", contaba ayer Pedro Mansilla, sociólogo. La taquillera de Bilbao asegura que se dio la orden de desalojo por megafonía, aunque algunas personas se quedaban merodeando por los vestíbulos.

A la compañía no le constaban ayer las situaciones de confusión. "Eso no quiere decir que no se hayan producido. Para comprobarlo tendríamos que hablar con cada estación", agregó el portavoz. Juan Francisco Moris, secretario general del Sindicato de Conductores, anunció ayer que exigirá responsabilidades por lo ocurrido.

Este sindicato aseguró que al menos en las estaciones de Plaza de Castilla, Sol, Latina y Cuatro Caminos sí se habían producido los desalojos. Moris añadió que desde hace tiempo su sindicato reclama mayor rigor ante situaciones como la de ayer. "La compañía oculta muchas veces la información para evitar que cunda el pánico entre los usuarios".