El circo estable ya no se construirá en Ventas

La plaza de toros de Las Ventas no compartirá espacio con el circo estable de Madrid. El Ayuntamiento va a ofrecer otro terreno a los promotores de la instalación que tomará el relevo del desaparecido circo Price, cerrado en 1970. La Gerencia Municipal de Urbanismo considera que la ubicación aprobada hace cuatro años no es la mejor, y que el espectáculo circense debe sacrificarse para permitir la ampliación de la M-30 y no hacer sombra al conjunto arquitectónico del coso taurino.

¿El espectáculo debe continuar? Al circo estable de Madrid le está costando llegar a cumplir este objetivo. En 1988 se aprobó su construcción junto a la plaza de toros de Las Ventas. Una ubicación "inmejorable" a juicio de los "empresarios circenses que a la larga les ha perjudicado. La instalación no ha parado de recibir empujones para que se alejara del recinto taurino.Primero se la desplazó unos metros. "Al ser la plaza de toros y su entorno un bien de interés cultural se acordó el cambio de ubicación del circo para que se instalara sobre el talud que existe entre la avenida de los Toreros y la M-30", explica la sociedad Puente de Ventas, que promueve la"transformación urbanística de la zona.

Ahora, el concejal de Urbanismo, José Ignacio Echeverría, pretende darle un empujón mayor y desplazar el circo cuatro kilómetros, hasta las proximidades del parque Tierno Galván. Aquel primer cambio, que la situó a orillas de la M-30, ha sido su perdición. El Ayuntamiento necesita ahora ese terreno para ampliar la vía de circunvalación.

El circo ha tenido todo en contra. Cuando se cedió el suelo a Circos Asociados, S A, en diciembre de 1990, se dio a los empresarios un plazo de 18 meses para construir la instalación. Sin embargo, no se ha puesto ni un solo ladrillo. Según fuentes de la empresa, los cambios de ubicación y los retrasos en la urbanización de la zona, que debía acometer la empresa municipal Puente de Ventas, les han impedido em-. pezar.

Operación urbanística

La operación puente de Ventas prevé la construcción de oficinas y viviendas y reinvertir el dinero obtenido de la venta de este suelo en mejora de los accesos, reubicación del mercado actual, construcción de aparcamientos subterráneos y reforma de los alrededores de la plaza de toros.Pero a esta intervención urbanística le queda por definir uno de sus pilares fundamentales: cómo solucionar el cuello de botella que sufre la M-30 a su paso por el puente. La interrogante sigue en al aire a pesar de que su solución debería estar prevista en el Plan de Accesos a Madrid, firmado por el Estado, la Comunidad y el Ayuntamiento.

"Estamos elaborando nuestra propia solución al nudo de la M-30, aunque exige la modificación de todo el puente de Ventas", explica el concejal de Urbanismo. "Nuestro proyecto es dar continuidad a las vías de servicio de la M-30 haciendo unos nuevos laterales a derecha e izquierda de los actuales". Las vías de servicio actuales se interrumpen al llegar al puente, obligando a los automovilistas entrar a los carriles centrales subir a la calle de Alcalá.

El proyecto municipal necesita, pues, terreno de los márgenes de la M-30, lo que implicaría morder por un lado una de las parcelas de la operáción (ya vendida y adjudicada a Reyal para construir oficinas) y por el otro el terreno destinado al circo estable.

"Quiero proponer a los promotores del circo un cambio de ubicación", explica Echeverría, quien ha pensado en una parcela del entorno de la Estación' Sur de Autobuses, otra de las grandes operaciones urbanísticas promovidas por el Ayuntamiento a la que también le falta por definir su pieza fundamental: la propia estación.

"Es una parcela mucho más extensa que la de Ventas y muy bien comunicada", explica el concejal. En esta zona, situada junto al parque Tierno Galván, donde se están levantando nuevos edificios de oficinas y un centro comercial, coincide la línea 3 del Metro con la de Cercanías de Renfe.

Negociar la permuta

El Ayuntamiento negociará esta semana la permuta de los terrenos con los promotores del circo estable de Madrid, entre los que se encuentra Arturo Castilla, el empresario más representativo del mundillo circense. La pasada semana, los promotores se encontraban en el extranjero viendo espectáculos para contratar.Los terrenos de Ventas se concedieron a la empresa Circos Asociados por un plazo de 50 años y a cambio de un canon anual de dos millones de pesetas. Los promotores tenían la obligación de dar un mínimo de 100 representaciones y montar un museo.

La empresa encargó el proyecto al arquitecto Salvador Pérez Arroyo, autor del Faro de Moncloa, que había terminado de diseñar un edificio con capacidad para 3.050 espectadores.