La creación de la FAR abre la puerta a la reforma de la Legión
La directiva por la que se constituye la Fuerza de Acción Rápida (FAR) del Ejército de Tierra, que entró en vigor ayer, abre la puerta a una profunda reestructuración de la Legión. La orden firmada por el ministro de Defensa, Julián García Vargas, sólo prevé asignar a la FAR una bandera de infantería ligera y otra de operaciones especiales de la Legión, la dos unidades que componen el Tercio Alejandro Farnesio, acuartelado en Ronda (Málaga), con unos 1.500 hombres en total.Sin embargo, el mismo documento señala que durante los próximos cinco anos se estudiará la posibilidad de asignar más unidades de la Legión y de "modificar sus plantillas para adaptarlas a nuevos cometidos dentro de la FAR como unidades mecanizadas o de montaña".Además del Alejandro Farnesio, la Legión cuenta con otros tres tercios: el Gran Capitán (2.000 hombres), en Melilla; el Duque de Alba (2.000 hombres), en Ceuta, y el Juan de Austria (1.200 hombres), en la isla de Fuerteventura.Según la directiva, la creación de la Fuerza de Acción Rápida obedece a "la necesidad de que el Gobierno disponga de un instrumento ágil y flexible con el que pueda dar una primera respuesta a situaciones de crisis o conflicto", así como de "encauzar la participación española en las operaciones de mantenimiento de la paz". La FAR intervendrá también en misiones derivadas de los compromisos con la OTAN.La Fuerza de Acción Rápida del Ejército de Tierra, mandada por un general de división, tendrá un Cuartel General y sendas unidades de transmisiones e inteligencia.
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