La crisis cubana se traslada a Nueva York

Más de 25.000 personas soportaron ayer temperaturas bajo cero en las calles de Nueva York en defensa de sus diferentes ideas sobre Cuba. Cerca de 22.000 eran cubanos del exilio que se manifestaron en contra del régimen de Fidel Castro, mientras que el resto, norteamericanos en su mayoría, participaron, a una manzana de distancia, en un acto de recaudación de fondos para ayudar a Cuba a mitigar sus penurias económicas.En el primer grupo estaban representantes de 29 organizaciones políticas encabezadas por la Fundación Cubano Americana, veteranos de más de 30 años de exilio llegados hasta Nueva York desde todos los puntos del país de Miami fundamentalmente-, familias reunidas en torno a una imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre y de la voz de Olga Guillot.

Entre los partidarios de Castro, que contribuyeron con 10 dólares cada uno a un acto musical benéfico -cinco dólares sí demostraban estar desempleados-, aparecieron algunos cubanos mezclados con puertoriqueños y chicanos más antigringos que procastristas, residuos de organizaciones marxistas norteamericanas, voces eternas de estadounidenses en contra de la intervención de su país en los asuntos intemos de otros.

Separados por una infranqueable barrera policial, el primer grupo aplaudía al presidente de la Fundación Cubano Americana, Jorge Más Canosa, mientras que el segundo respaldaba la convocatoria hecha, entre otros artistas norteamericanos, por el músico de origen jamaicano Harry Belafonte y los actores Martin Sheen y Ed Asner, el protagonista de la serie de televisión Lou Grant.

La jornada fue, en realidad, una gran demostración de fuerza del exilio cubano. Pocas comunidades de las que llenan este país son capaces de reunir- años después de haber abandonado su país, a tantas miles de personas para reivindicar una esperanza que ahora creen acariciar con las puntas de sus dedos.

Jorge Mas Canosa, presidente de la Fundación Cubano-Americana, la más poderosa organización del exilio con 200.000 rniembros, según sus propios dirigentes, aseguró que los miembros del exilio se oponen a la violación del bloqueo porque Ios bienes de consumo que se envían a la isla nunca llegan al pueblo cubano, sino que se los quedan Fidel Castro y la nomenclatura".

Lo que Miami promueve, según él, es cerrar el cerco del aislamiento sobre Fidel Castro "con la esperanza de que el próximo verano se produzca el colapso total del régimen".

En Moscú, coincidieron ayer dos manifestaciones opuestas. Una vientena de personas se reunió, a primera hora de la mañana ante la embajada de Cuba con pancartas opuestas a la dictadura. Allí les esperaba otra manifestación de signo contrario, portando retratos de Fidel y Raúl Castro y Che Guevara. Un grupo de periodistas fue testigo de acalorados debates que derivaron en peleas, hecho que obligó á intervenir a la policía moscovita que formó un cordón de seguridad para separar a ambos grupos, informa Efe.