Los mercados no registran grandes variaciones

El tan esperado recorte en la tasa de descuento por parte de la Reserva Federal americana no llegó ayer a producirse. Esta se mantuvo en actitud pasiva tanto en lo que respecta a dicho recorte como a la inyección o drenaje de liquidez en el sistema. Su presidente, Alan Greenspan, se declaraba no partidario de un recorte en las tasas impositivas por su negativa repercusión sobre el déficit presupuestario, inclinándose por tanto hacia medidas monetarias de reactivación.

El mercado encajó negativamente el que dichas medidas no se produjeran en el momento esperado sobre todo por haber sido descontadas por el mismo. Si a ello añadimos el nebuloso panorama económico que produjo el anuncio de General Motors sobre el ajuste de plantillas previsto para el 1992 con el despido de entre 10.000 y 1 5.000 empleados de las plantas de Texas y Ohio, se comprenderá el ambiente negativo que imperó en Wall Street. Al cierre, el índice Dow Jones mejoró 5, 81 puntos para quedar en el 2.908, 09. También presionó en el mercado el hecho de que mañana viernes es el último día para poder vender valores con a efectos de la declaración de minusvalías para el actual ejercicio.

La Bolsa de Londres encajó también una jornada operativa a la baja por razones similares de cierre de libros de fin de año y un panorama económico poco optimista. Las tomas de beneficio aprovechando el alza de la semana precedente para un cierre de libros saneado presionó asimismo el mercado. Al cierre el índice FT1 00 cedió 1 9, 3 puntos y se situó en 2.413, 6 puntos. Después de cinco días consecutivos de ganancias en la Bolsa de París el índice ayer bajó 5, 56 puntos en jornada muy técnica y gobernada por el cuadre de libros.