Las funcionarias de los juzgados se quejan de que se les rompen las medias

La falta de espacio flisico en las oficinas de los juzgados de la plaza de Castilla es tal que muchas funcionarias "sufren roturas frecuentes de sus medias" debido a que "prácticamente no existen pasillos, y los golpes con armarios, puertas y mesas son continuos", según denuncia la Confederación Sindical Independiente de Funcionarios.

La denuncia viene recogida en un informe que ha elaborado el sindicato sobre las condiciones de trabajo en los edificios judiciales de Madrid.El CSIF asegura en este informe que existe hacinamiento de funcionarios en los juzgados. También denuncia el hecho de que, por ejemplo, haya más de 10 funcionarios en una oficina que mide "entre 70 y 75 metros cuadrados", y que el despacho del juez, que suele estar anexo y ocupado por una sola persona, tenga una superficie de alrededor de 35 metros cuadrados, aproximadamente la mitad que la oficina.

Cientos de expedientes

Este sindicato, el más representativo del sector de justicia, se queja de que las oficinas de los juzgados de instrucción, salvo excepciones, son incluso más pequeñas que las de primera instancia, y que en ellas hay, además de los funcionarios, "10, 11 o 12 mesas de 1,25 por 0,80 metros de extensión, con sus respectivas sillas; de 15 a 20 armarios, algunos encima de otros y con puertas que se abren hacia fuera; cientos de expedientes en los sitios más inverosímiles; usuarios, escaleras, impresoras ...".Por otro lado, el CSIF afirma que los dos edificios judiciales de la plaza de Castilla, por los que pasan "entre 7.000 y 8.000 personas al día", tienen "un alto riesgo potencial" por su altura (28 metros cada uno), y, sin embargo, carecen de un plan de emergencia y evacuación para el caso de que se produzca un siniestro.

El informe de este sindicato critica asimismo "la mala instalación del sistema informático". Muchas pantallas de ordenador, de las alrededor de mil que hay en los juzgados, según el CSIF, están instaladas al lado de los ventanales o en lugares incorrectos.

Según este sindicato, "existen cientos de fotocopiadoras y 12 impresoras en lugares sin ventilación", por lo que los funcionarios, bien por deficiencias en el sistema de aireación, o bien porque el mismo "no se revisa de forma periódica" corren el riesgo de "estar respirando partículas de zinc, barnices, fibra de vidrio o polvo" derivadas de estos aparatos.

El CSIF sostine que el uso continuado de las fotocopiadoras puede acarrear graves riesgos para la salud: "El toner es uno de los más graves problemas ( ... ), es una mezcla de resinas, pigmentos y hollín que suele contener mitropiritas".