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España se coordinará F con Portugal para rentabilizar la solidaridad comunitaria

Los jefes de Gobierno español y portugués acordaron ayer actuar conjuntamente para sacar el máximo provecho del compromiso de solidaridad con los países comunitarios menos desarrollados adquirido por los Doce en la reciente cumbre europea de Maastricht. Acompañados por siete ministros -en la delegación española figuraban los titulares de Economía, Industria, Interior y Portavoz-, Felipe González y Aníbal Cavaco Silva celebraron en la ciudad de Trujillo (Cáceres), dos semanas antes de que se inicie la presidencia portuguesa de la CE, su octava reunión anual.

"Tenemos la intención de armonizar nuestras posiciones para defender conjuntamente nuestros intereses ( ... )", afirmó Gronzález durante una rueda de prensa al término de la reunión. Su homólogo luso fue más concreto al anunciar que, a partir de enero, se reunirán los expertos de ambos países, y en marzo, los ministros, para formular ante las instancias comunitarias propuestas comunes sobre la construcción de vías de comunicación transfronterizas.Las tesis españolas, compartidas por el primer ministro luso, sobre la solidaridad entre ricos y pobres en el seno de la CE quedaron recogidas por la cumbre de Maastricht, que acordó crear un fondo especial, del que se beneficiarán principalmente España y Portugal, para costear infraestructuras de transporte. También adquirió el compromiso de tener más en cuenta la prosperidad de cada Estado miembro a la hora de fijar su contribución a la CE.

González sondeó además la disponibilidad de su homólogo a acudir a la cumbre iberoamericana de Madrid, a la que asistirán a finales de julio los jefes de Estado de ese subcontinente. A su regreso, en julio, de Guadalajara (México), donde tuvo lugar la primera reunión de estas características, Cavaco Silva afirmó que la asistencia de su país a la cita madrileña no podía asegurarse de antemano.

Tampoco acabó ayer por disipar las dudas sobre su presencia. "Después de discutir el contenido y la metodología de trabajo", declaró Cavaco Silva, "veremos cómo llegar a la cumbre" de Madrid. "Ciertamente, Portugal participará", concluyó, pero se cuidó de especificar a qué nivel. En vísperas de la reunión de Guadalajara surgieron ya dudas sobre la asistencia portuguesa, que fueron interpretadas en círculos diplomáticos españoles, como fruto de la rivalidad entre el jefe del Estado, el socialista Mario Soares, y el primer ministro, de ideología liberal.

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