El abogado Jaime Cortezo, hallado en el maletero de su coche degollado y maniatado

El abogado Jaime Cortezo Velázquez-Duro, ex vocal del Consejo General del Poder Judicial y ex secretario general de Izquierda Democrática, fue hallado muerto ayer a causa de tres navajazos en el cuello. El cadáver estaba en el maletero de su coche, aparcado en la calle de Mateo Inurria de Madrid, donde fue descubierto casualmente por una hija suya. Antes de levantar el cuerpo, la policía cortó la calle y adoptó grandes medidas de precaución ante la posibilidad de que los asesinos hubieran colocado una bomba. Según las primeras hipótesis, el crimen es obra de delincuentes comunes.

Jaime Cortezo, de 60 años, se despidió de su secretaria sobre la siete de la tarde del martes y le explicó que iba a su domicilio para recoger a su esposa. Después salió del bufete de la calle de Félix Boix, cerca de la plaza de Castilla, y ya no volvió a vérsele con vida. Alarmado por su inexplicable tardanza, Eugenio Cortezo, hijo del abogado, presentó denuncia por desaparición en la comisaría del distrito de Chamartín.A primeras horas de la tarde de ayer, una hija de Cortezo descubrió su coche, un Saab 9000, de color gris, matrícula M-1230-JX, perfectamente aparcado delante de los laboratorios Alter, en la confluencia de las calles de La Hiedra y Mateo Inurria. Agentes del Cuerpo Nacional de Policía y de la Policía Municipal acordonaron la zona y cortaron el tráfico, en prevención de que en el automóvil de Cortezo pudiera haber una bomba-trampa.

Los inspectores de la Brigada Provincial de Información ni siquiera movieron el cadáver, que estaba en el maletero, por temor a que, al hacerlo, se pudiera activar un artefacto explosivo oculto bajo una trampilla. La policía rastreó el coche con perros especializados en detección de bombas, que no dieron muestras de excitación, por lo que el juez de guardia ordenó el levantamiento del cadáver tres horas después.

Tres navajazos

La víctima, que estaba maniatada con un pedazo de cordel, murió degollada a causa de tres navajazos en el cuello. También presentaba un corte en la mano derecha, que muy posiblemente se produjo cuando trató de defenderse. El forense comprobó que Cortezo había fallecido unas horas antes.Cortezo, conservaba en su muñeca izquierda un reloj de oro, una cadena y una valiosa medalla del mismo metal, y una cartera en la que, no había dinero, pero sí varias tarjetas de crédito. Ante estas circunstancias, la policía cree que el móvil del crimen no fue el robo, aunque no se atreve a aventurar hipótesis.

Fuentes policiales han manifestado que Jaime Cortezo estuvo amenazado por ETA años atrás, pero descartan que esta organización terrorista se halle tras el asesinato. "El método para matarle no es habitual entre los etarras".

Los investigadores del caso suponen que Cortezo pudo ser secuestrado por un grupo de chorizos que pretendían mantenerle retenido para posteriormente exigir un rescate por su liberación. "Aparentemente no hay ninguna explicación de por qué lo mataron", dijo un agente, que reconoció que "el asunto es bastante raro".

Jaime Cortezo nació en Cabueñes (Gijón) y estaba casado con Mercedes Albert García-Prieto. Militante antifranquista, fundó en 1958 Izquierda Demócrata Cristiana, que posteriormente se denominó Izquierda Democrática, de la que fue secretario general hasta que en 1977 ingresó en UCD. El 26 de noviembre de 1974 fue secuestrado y apaleado por ultras en la calle Segre, de Madrid. En septiembre de 1980 dejó de ser concejal de UCD en el Ayuntamiento de Madrid para incorporarse al primer Consejo General del Poder Judicial.

Joaquín Ruiz-Giménez, ex Defensor del Pueblo y antiguo colaborador del fallecido en la revista Cuadernos para el Diálogo y en Izquierda Democrática, manifestó ayer que se sentía "conmocionado". "Era un hombre amable con todos, tolerante y respetuoso con sus adversarios. Todos los crímenes son horribles, pero éste es, además, incomprensible", afirmó.

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