La 'quinta de Carrero' estrena la nueva ley del Servicio Militar

La quinta de Carrero Blanco, integrada por los nacidos en 1973, año del asesinato del presidente del Gobierno y mano derecha de Franco, estrenará la nueva ley del Servicio Militar, que aprobó el jueves el pleno del Congreso y entrará en vigor el próximo 1 de enero. La principal novedad de la ley es la reducción de la mili de 12 a nueve meses, por lo que quienes se incorporen en febrero, fecha del primer llamamiento, se licenciarán en noviembre.Sin embargo, no todos los 369.092 varones nacidos en 1973 estarán pendientes del sorteo que se celebra hoy en el Regimiento de Artillería de Fuencarral (Madrid), en el que una de las 366 bolas (tantas como días del año) determinará el Ejército, la región militar y la fecha de su ingreso en filas, pues sólo el 35% de esos jóvenes (129.554) empezarán la mili el año próximo.

Los restantes conseguirán librarse o aplazar el servicio militar. En el primer grupo destacan los excluidos por problemas médicos (28.203) y en el segundo, los que tienen prórroga por estudios (142.226). Por el contrario, entre los que sortean hoy figuran 72.353 jóvenes procedentes de reemplazos anteriores.

Los mayores beneficiarios de la nueva ley serán 245 reclutas que en 1992 cumplirán 30 o más años. En el momento en que la ley entre en vigor o cumplan dicha edad se librarán de la mili, en virtud del artículo que fija en 30 años la edad de exclusión.

26.755 plazas

Para los demás, la principal novedad será la posibilidad de elegir destino dentro del Ejército y la región militar que les corresponda por sorteo. Próximamente, todos los mozos recibirán un catálogo de plazas, entre las que podrán seleccionar diez. Para la adjudicación de los destinos se valorará la titulación o experiencia del recluta, su situación familiar, el hecho de que cumpla 19 años en 1992 y el que tenga hermanos con la mili hecha.Las plazas ofertadas (26.775) suponen algo menos del 13% de los sorteados, por lo que sólo una minoría verá satisfecha su preferencia. El Ministerio de Defensa ha prometido, no obstante, tener en cuenta las respuestas de los demás para destinarlos a las funciones más adecuadas.

La nueva ley dedica un capítulo a los derechos y deberes de los soldados, que sistematiza derechos antes dispersos en diversas normas, como los de expresión, reunión, asociación, intimidad, circulación o libertad religiosa, con los límites impuestos por la disciplina militar. Una enmienda de última hora contabiliza el tiempo de baja por accidente o enfermedad contraida en la mili como servicio en filas.

Por otra parte, el 96% de los jóvenes catalanes es contrario al servicio militar, según un estudio del centro Dona i Societat. Además, el 60% de los encuestados cree que el Ejército no sirve para defender la paz y el 50% ve en los cuerpos armados "un peligro para la democracia", informa Servimedia.