El 'regional-sindicalismo'

El precio del cierre ordenado de una parte de Hunosa y de la reconversion industrial asturiana es el centro de un debate que subyace a los fogonazos del anuncio de huelga general por parte de los sindicatos y a las declaraciones políticas de los partidos que se oponen al ajuste previsto por el INI en los yacimientos mineros. Entre una oferta de 600.000 millones atribuida a Industria -pero no confirmada por el ministerio- y la réplica de dos billones reclamada por el Gobierno regional, media la posición del SOMA-UGT cuyo secretario general, José Ángel Fernández Villa, ha remarcado con un rotundo: "Asturias no está en venta".

Lo población minera constituye la base social de] SOMA-UGT y a la vez garantiza el soporte electoral del socialismo asturiano. Alrededor de José Ángel Fernández Villa, hombre fuerte de la Federación Socialista Asturiana -presidida por el Ministro de Trabajo Martinez Noval-, consejero de Hunosa y miembro de la Ejecutiva Federal del PSOE, se ha estructurado el rechazo casi unánime al plan presentado por Hunosa. En esta posición coinciden hoy los sindicatos y el Gobierno regional, presidido por el socialista José Luis Rodriguez-Vigil, cuyo ejecutivo cuenta con hombres muy próximos a Fernández Villa, entre ellos el consejero de Industria, Victor Zapico.La convergencia de criterios entre SOMA-UGT y Gobierno autónomo, calificada en medios del Principado como la via del regional-sindicalismo, es tan clara en estos momentos "que no se puede concretar donde comienza una y termina otra", señalan fuentes del PSOE. Hoy la corriente villista, que en medios del PSOE tiene sus raíces en los círculos más próximos a Alfonso Guerra, es el gérmen de una división en el seno del socialismo sobre la reconversión de Asturias. Frente a esta tendencia, el INI, el Ministerio de Industria y el Gobierno, plantean la necesidad de abordar la reconversión de la mineria, los ajustes en la siderurgia y de las fábricas de armamento de forma inmediata porque "cuanto más rápido se realice mayor será el excedente de recursos que quedará libre para paliar sus consecuencias", señalan fuentes del holding público.

En medios empresariales asturianos se considera hoy que "el plan de Hunosa es una oportunidad histórica para inicar cambios en profundidad". Algunos recuerdan que las rigideces de la postura de SOMA-UGT por razones sociales y territoriales frente a "la logica economicista del INI", son una réplica de las razones utilizadas por Fernández Villa en 1983 para rechazar una oferta global de Carlos Solchaga -entonces Ministro de Industria- "El proyecto de Solchaga empezaba por la minería, como el de Claudio Aranzadi, y fue rechazado precisamente porqueeste sector constituye la base social del villismo que tiene en un puño al socialismo asturiano" señalan las mismas fuentes.

La influencia de Fernández Villa se ha demostrado indiscutible. En la última asamblea anual de la minería celebra este mes en León, el secretario del SOMA-UGT criticó duramente la política industrial del Gobierno en el Principado. Fernández Villa hizo un llamamiento a la movilización social de las cuencas, flanqueado a derecha e izquierda por Martínez Noval y Franciso Fernández Marugán, responsable económico del PSOE.