La capital croata se prepara para un ataque del Ejército yugoslavo

Zagreb se preparaba anoche para un ataque del Ejército federal yugoslavo, que ayer desató una nueva escalada contra Croacia para prevenir que sus unidades "mueran de hambre y sean destruidas". El Gobierno croata decidió cortar todo tipo de suministro a las guarniciones de las tropas federales en su territorio. En Belgrado estallaron tres bombas en atentados adjudicados por la policía serbia al terrorismo croata.Los accesos a la capital de Croacia, Zagreb, fueron cortados con barricadas levantadas con sacos terreros y tanquetas. Han sido reforzados los puestos de control y se ha pedido a la población que evite viajar. Fuentes del Gobierno croata alertaron del peligro de un eventual ataque aéreo, que podría centrarse en los edificios del Parlamento, la catedral y los medios de comunicación.

Los combates fueron los más violentos hasta ahora. En la ciudad de Osijek (150.000 habitantes), que fue bombardeada con fuego de mortero durante 13 horas, fue alcanzado el hotel Osijek, en donde se hallaban alojados los periodistas extranjeros; entre ellos, cinco españoles. El miedo empieza a llegar a la tranquila Zagreb, cuyos habitantes parecían vivir al margen de lo que ocurre en las trincheras del cada vez más cercano frente.

La captura en territorio croata del general federal Milan Aksentijevic, jefe de la Quinta Región Militar, junto con otros 16 oficiales, y el corte de los suministros a las guarniciones federales hacían temer una respuesta contundente del alto mando federal contra Zagreb.

Tras la caída de Kostajnica en poder serbio, las fuerzas croatas abandonaron en la mañana de ayer la vecina localidad de Tubica. La ciudad de Petrinja se hallaba ayer completamente dividida entre las fuerzas serbias y croatas.

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