Yeltsin exige un ejercito para Rusia y una purga política

El presidente de Rusia, Borís Yeltsin, quiso subrayar ayer que la situación política ha experimentado una profunda modificación tras el golpe de Estado fracasado y recuperó algunas de sus reclamaciones más radicales: una mayor independencia económica para la República rusa, en detrirriento del poder central, y un ejército propio, para no estar iridefenso ante situaciones como la desencadenada por los golpistas.Yeltsin anunció la adopción de un decreto que va a poner bajo la autoridad rusa a todas las empresas situadas en el territorio de la república, incluidas las industrias ligadas a la defensa. El presidente ruso firmó ayer mismo otro decreto por el que se prohibe la actividad del Partido Comunista en el interior de las empresas.

Ayer fue el día en que Yeltsin pudo saborear su triunfo. Desde el balcón de la Casa Blanca y ante la multitud de moscovitas que acudió a celebrar la derrota de los golpistas, el hombre que ha encarnado la resistencia lanzó un sonoro "hemos ganado", entre el delirio de los mánifestantes.

En el mástil del Parlamento ya ondeaba la bandera de la Rusia prerrevolucionarla en lugar de la roja de la hoz y el martillo. En un ambiente de gran euforia agregó: "El golpe ha fracasado. Sus dirigentes están arrestados. Esto no debe suceder nunca más en nuestro país".

Borís Yeltsin exigió "una re forma del poder político de la Unión" y anunció una purga de los cuadros de las regiones que han manifestado su apoyo al golpe. Algunos centenares de asistentes gritaron "Gorbachov, dimisión", sin lograr un apoyo mayoritario.