ETA quiso romper con 10 kilos de amonal las fiestas de San Sebastián

ETA estuvo ayer a punto de convertir la tradicional Salve de San Sebastián en una matanza. Durante los últimos años se han registrado graves incidentes durante ese acto cívico-religioso, que ha sido aprovechado por grupos radicales para insultar a las autoridades vascas y provocar violentos incidentes. Ayer no fue una excepción, pero, además, dos horas antes del acto fue desactivada una potente bomba compuesta por 10 kilos de amonal y dinamita en el bulevar de San Sebastián, lugar donde estaba previsto que se concentraran centenares de personas para observar el desfile de las autoridades.

La bomba -colocada a unos 50 metros de donde tenían que pasar las autoridades- estaba encima de una cabina de la ONCE, y su presencia fue advertida por un ciudadano desconocido que llamó a la policía. Si la bomba hubiera estallado, "se habría producido una gran matanza, porque esta tarde [por la de ayer] se congregan miles de personas para presenciar el acto de la Salve", según el Gobierno Civil.El recorrido de las autoridades -con el lehendakari José Antonio Ardanza a la cabeza-, que duró unos cinco minutos, fue acompañado en todo momento de numerosos insultos al lehendakari y a sus acompañantes y gritos a favor de ETA.

A mediodía, y también en la capital guipuzcoana, portavoces de la coordinadora Lurraldea y de Herri Batasuna advirtieron que si no se aprueba el nuevo trazado de la autovía, "el conflicto volverá al punto de partida". Esta frase se ha interpretado como el anuncio de una reactivación de la campaña terrorista de ETA.

El presidente del Gobierno vasco, José Antonio Ardanza, emplazó a HB a defender en las Juntas Generales de Guipúzcoa el trazado alternativo de la autovía y pidió a ETA que retire sus amenazas.

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