Una realidad silenciada

Hace unos días se ha celebrado en Madrid un congreso sobre la vida religiosa en España y su compromiso con los sectores más marginados, al que hemos asistido más de mil religiosos-as.En el mismo se ha tratado cuál es nuestra presencia y acción de Iglesia y de solidaridad con los más oprimidos y llamados los últimos. Como muestra, los seminarios de trabajo fueron: mundo rural, paro, droga, sida, transeúntes-marginados, prostitución, gitanos..., así hasta 12 grupos de discusión y proyectos.

Que una noticia de este tipo sea silenciada en los medios de comunicación social y, sin embargo, noticias aisladas y no siempre representativas de la Iglesia se aireen es muy significativo. Yo pregunto: desde los medios de comunicación, ¿cuál es la imagen de Iglesia que se pretende difundir? ¿Por qué no dar a conocer a quienes a veces mucho hablan, poco contemplan o atienden todas las acciones de Iglesia que en millares de rincones luchan y defienden la causa de los marginados?

Son muchos los cristianos comprometidos, religiosos, religiosas y sacerdotes que día a día, calladamente, sin apenas recursos pero mucha humanidad, trabajamos por una sociedad más justa, sobre todo por los más marginados, y si bien es cierto que, como digo, a veces es una labor callada, no olvidamos el aspecto de la denuncia solidaria en la lucha por los derechos de las personas.-

Hermano de San Juan de Dios.