Serra considera un "grave error político"el rechazo de Pujol

El vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, afirmó anoche en Madrid que las declaraciones del presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, en las que le negaba que pudiera ser su interlocutor en el Gobierno son un "grave error político". "Cerrar las puertas al diálogo o la comunicación", dijo Serra, es siempre un error. Pujol rechazó el lunes la propuesta del presidente del Gobierno, Felipe González de canalizar a través del vicepresidente las futuras relaciones entre el Gobierno y la Generalitat y ayer ratificó esta negativa.Por la mañana, Serra se reunió con el secretario de Organización del PSOE, Txiki Benegas; el presidente del Grupo Parlamentario Socialista, Eduardo Martín Toval, y el ministro de Relaciones con las Cortes, Virgilio Zapatero, para diseñar la actividad legislativa que impulsará el Gobierno y el grupo parlamentario tras las elecciones del 26 de mayo. El pacto de Estado autonómico, el pacto de competitividad o "de progreso", el debate sobre el aborto y la reforma del servicio militar son asuntos previstos para antes del verano y se empezará a estudiar la ley del Gobierno y otra que aglutinará lo referente a los derechos fundamentales de la persona.

En la reunión de ayer se desarrollaron las tres líneas de actuación que se ha marcado el Gobierno (ver EL PAÍS del 22 de abril) en torno a la integración europea, el pacto de competitividad -que implica a empresarios, sindicatos y fuerzas políticas- y la potenciación de los servicios públicos. Desde todos los ámbitos de poder del PSOE se intenta actuar al unísono, lo que se considera factible desde el área de la vicepresidencia.

Desde este ámbito se asegura que lo ocurrido con el plan de viviendas "no va a volver a ocurrir" y se afirma que todos han aprendido con la experiencia y que la coordinación entre Gobierno, partido y grupo parlamentario será un hecho.

Siempre según estos interlocutores de la vicepresidencia, nose admite que haya habido desaire hacia Serra por el grupo parlamentario porque no haya acudido todavía a la reunión del mismo, mientras que ya lo han hecho otros ministros. Las personas del entorno del vicepresidente afirman que, días después de su nombramiento, Serra acordó con Eduardo Martín Toval que acudiría a la reunión del grupo pasadas las elecciones del 26 de mayo y que entonces expondría la actividad del Gobierno desde ese momento y hasta el final de la legislatura.

Nadie duda que prácticamente será imposible que de aquí a las elecciones se produzca otra escaramuza dentro de la familia socialista.