240 coroneles piden pasar voluntariamente a la reserva para no perder dinero

Un total de 240 coroneles se han acogido desde enero a la disposición adicional de la ley de Presupuestos Generales del Estado para 1991 que les permite pasar voluntariamente a la reserva conservando las mismas retribuciones que si continuasen en activo con destino, según datos facilitados por el ministro de Defensa, Julián García Vargas, a la comisión correspondiente del Congreso. La mayoría de estos militares ganarán más dinero en la reserva que en activo, ya que el exceso de coroneles con que cuenta el Ejército de Tierra hace que alrededor de la cuarta parte de los mismos se encuentre en situación de disponible forzoso, en la que transcurrido cierto tiempo se deja de percibir el complemento por destino.Esta fórmula, según la cual muchos coroneles ganarán más dinero en la reserva que en activo (ver EL PAÍS del 11 de julio de 1990), ha sido ideada por Defensa para reducir el importante excedente de oficiales de dicho empleo, que bloquea el ascenso de los profesionales más jóvenes. El decreto del pasado 1 de marzo, por el que se adaptan las plantillas de las Fuerzas Armadas a la ley del Personal Militar, fija un cupo de 600 coroneles para el Ejército de Tierra, que en enero de 1990 tenía 1.119 coroneles, casi el doble.

Aunque el objetivo de contar con sólo 600 coroneles debía haberse alcanzado el 1 de enero de este año, Defensa se ha dado una prórroga para cumplirlo y la orden ministerial de 7 de marzo pasado, por la que se fijan las plantillas transitorias de las Fuerzas Armadas hasta el 30 de enero de 1992, cifra en 857 los coroneles que debe tener el Ejército para esa fecha.

En su comparecencia ante la Comisión de Defensa del Congreso, García Vargas reconoció que "las plantillas de las Fuerzas Armadas no están aún totalmente equilibradas en escalas y empleos" y que el exceso de coroneles sigue siendo uno de los mayores problemas. No obstante, destacó el éxito de la fórmula incluida en los presupuestos y se mostró confiado en que "al final de la presente legislatura este problema de efectivos puede estar resuelto".

Los cuadros de mando de las Fuerzas Armadas han pasado de 65.000 a 56.000 en el quinquenio 1985-1990; lo que ha supuesto una reducción del 15% en Tierra y del 8% en la Armada y la Fuerza Aérea.