Serra, Solchaga y Almunia entregan a González informes sobre como reorganizar los ministerios

El final de la guerra del Golfo ha colocado en primer plano la aplazada crisis de Gobierno. Ayer mismo, el Ejecutivo enviaba dos solicitudes al presidente del Congreso, Félix Pons. Una, la de celebración del debate sobre el estado de la nación para los días 20 y 21 de marzo, con el nuevo Gobierno en el banquillo azul. La segunda, para que el presidente del Gobierno, Felipe González, explique el martes ante el Pleno la situación política de postcrisis. Con su comparecencia ante el Congreso el martes, el Gobierno cierra el ciclo explicativo de la crisis del Golfo en su "fáse aguda".

Entre numerosos miembros del Gabinete existía ayer la sensación de que hoy acuden al último Consejo de Ministros del Gobierno nacido en julio de 1988 y prolongado tras las eleccíones generales de octubre de 1989. Felipe González reiteró al lehendakari Ardanza el miércoles que la crisis de Gobierno era inminente y añadió que los cambios no iban a ser "en profundidad". La semiparalización de la Administración por la provisionalidad del Gobierno ha levantado protestas desde los medios económicos, la oposición y el propio interior del Gabinete. El ministro de Economía, Carlos Solchaga, se ha hecho eco de esa paralización. En la Moncloa ha causado impacto que un medio influyente en las esferas económicas internacionales, como el Financial Times, haya presionado por el fin de la provísionalídad gubernamental.El presidente del Gobierno, absorto por el curso de la guerra del Golfo, no ha realizado aún consultas para la formación del Gobierno. Sin embargo, ha estado estudiando papeles sobre la reorganización de los ministerios, presentados por los ministros de Economía, Carlos Solchaga; de las Administraciones Públicas, Joaquín Almunia, y de Defensa, Narcís Serra. Felipe González estudia la posibilidad de crear un Ministerio de Infraestructuras, que acoja Obras Públicas Transportes y Comunicaciones, tesis defendida por Serra También estudia un proyecto de fusión de Sanidad, Consumo y Asuntos Sociales, en un Ministerio de Bienestar Social, y la creación de un macroministerio político que recoja la cartera de Administraciones Públicas así como Presidencia y Relaciones con las Cortes, en línea con las tesis de Almunia.

En unas declaraciones realizadas hace quince días a TVE, González, al reiterar que el aplazamiento de la crisis del Gabinete se debía a la guerra, también manifestó que los cambios afectarían a ministerios relacionados con el conflicto, lo que apuntaba a las carteras de Defensa, Asuntos Exteriores y Portavoz del Gobierno.

En este sentido, el titular de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordófiez, se ha convertido en un elemento clave en esta crisis. Su continuidad o no en el Gabinete condiciona a las restantes piezas en juego: los ministros de Defensa, Narcís Serra; de Educación, Javier Solana; de Economía, Carlos Solchaga, y de Administraciones Públicas, Joaquín Almunia. Estos cuatro ministros, emergentes tras la salida de Alfonso Guerra del Gobierno, tienen, en ausencia de Fernández Ordóñez, un reparto perfilado de funciones, según algunos medios del Gobierno: Serra, Asuntos Exteriores; Solchaga, Economía; Almunia, un macroministerio político y Solana, la vicepresidencia. Desde el propio Gobierno se admite, sin embargo, que "Fernández Ordóñez puede aspirar a lo que quiera, pues ha bordado a Felipe González la crisis del Golfo", lo que complica algo más el relleno de la quiniela del presidente para los puestos claves.

Por otra parte, la necesidad de una presencia del aparato del PSOE en el Gobierno se ha difuminado al mes y medio de la salida de Guerra del Gabinete. Desde el aparato del partido, se pujaba por la presencia del secretario de organización socialista, Txiki Benegas, en un puesto clave del Gobierno para garantizar las relaciones con el partido. En estos momentos, el aparato asume su ausencia elel Gobierno, tras un plazo que ha serv'do a los ministros al alza, tras la salida de Guerra, para crear un clima favorable a la autonomía de Felipe González para elaborar su Gabinete.