La coalición lanzará la ofensiva terrestre si Sadam no anuncia hoy que se retira

La paciencia de la coalición se agota por momentos. Una verdadera guerra de nervios se ha apoderado de las cancillerías a la espera de la respuesta oficial por parte de Irak al plan de paz formulado el lunes por el presidente de la URSS, Mijail Gorbachov. La radio oficial iraquí anunció anoche que el ministro de Asuntos Exteriores, Tarek Aziz, viajará "pronto", probablemente hoy mismo, a Moscú para entregar la crucial respuesta, decidida ayer en una reunión del Consejo de Mando de la Revolución que presidió Sadam Husein. El sentido de la decisión iraquí se mantuvo en absoluto secreto.

El secretario de Estado norteamericano, Jarnes Baker, se mostró tajante anoche: si Irak no retira inmediatamente sus tropas de Kuwait, su suerte está echada y la ofensiva terrestre comenzará."Tenemos que esperar hasta el jueves", había afirmado horas antes el ministro de Exteriores iraní, Alí Akbar Velayati, tras entrevistarse en París con el presidente francés, François Mitterrand. La coalición, en respuesta al deseo soviético, aceptó aguantar hasta la madrugada de hoy antes de lanzar la ofensiva final, según reveló ayer el ministro de Asuntos Exteriores francés, Roland Dumas. Una retirada iraquí sin condiciones, sin tergiversaciones y sin equívocos" anunciada durante el día de hoy abriría la vía al cese de las hostilidades.

Los bombardeos sobre Bagdad y otras ciudades iraquies en el sur del país prosiguieron sin pausa durante el día de ayer, al tiempo que las tropas multinacionales protagonizaron diversas escaramuzas en la frontera entre Arabia Saudí y Kuwait. El ministro de Información de Irak, Latif Jasem, retó ayer al general Norman Schwarzkopf a "probar suerte" en el campo de batalla, después de que el militar que comanda las tropas de la coalición asegurara que el Ejército de Sadam está al borde del colapso.

En Madrid, el ministro de Exteriores español, Francisco Fernández Ordóñez, evitó pronunciarse a fondo sobre la iniciativa de Gorbachov, pero dejó traslucir un fuerte escepticismo sobre sus posibilidades de éxito. En Estrasburgo, el Parlamento Europeo enmendó, la plan a los ministros de Exteriores de la Comunidad Europea con pronunciamientos más nítidos a favor del plan de paz.

En Teherán, las embajadas del Reino Unido, Turquía, Italia y la URSS sufrieron ayer atentados que no causaron víctimas. Otras legaciones occidentales en Irán recibieron amenazas telefónicas Los atentados no fueron reivindicados.

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