Iglesia y lujo
¡Se necesita desfachatez! El diario oficial del Vaticano, L'Osservatore Romano, reprende duramente al astro futbolístico Diego Armando Maradona y lo tacha de ostentoso, entre otras cosas, por haberse comprado dos automóviles de lujo.El cinismo alcanza cotas inimaginables cuando el acusador se olvida de que hace poco más de tres meses, el pasado 9 de septiembre para ser exactos, Juan Pablo II, vicario de Cristo, consagró en Yamusukro, Costa de Marfil, una copia casi exacta de la basílica de San Pedro, de Roma, con un coste que, según las fuentes, oscila entre los 16.000, y los 30.000 millones de pesetas. ¡Una modesta parroquia de barrio, vaya!
Para arrojar la primera piedra hay que estar libre de culpa, y la Iglesia católica, apostólica, romana se halla tan repleta de obras faraónicas que ofenden al humilde Dios que ella dice venerar, pero cuyos dictados no sigue, que huelgan más comentarios. ¡Si Jesucristo levantara la cabeza!-
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