El FBI contará con un enlace en Madrid para colaborar en la lucha antidroga

Las delegaciones de España y Estados Unidos en la reunión del Grupo de Trevi, que se celebra en Roma, ampliaron ayer en un contacto bilateral la colaboración entre ambos países en materia de represión del tráfico de droga y de lucha antiterrorista. Así, se concretó la presencia en Madrid de un enlace del FBI para facilitar el intercambio de información no sólo de las bandas de narcotraficantes, sino sobre delitos conexos, como el blanqueo de dinero.

Ambas delegaciones, encabezadas por el titular del Interior, José Luis Corcuera, y el fiscal general de EE UU, Richard Thornburg, cuyas funciones son equivalentes a las de los ministros de Justicia e Interior, volverán a reunirse hoy. A la reunión asistirá también William Seassons, director del FBI, quien tiene previsto viajar a Madrid este fin de semana.En la entrevista de ayer se profundizó en las cuestiones de cooperación en la lucha contra el narcotráfico abordadas en la reciente visita que Corcuera, el secretario de Estado para la Seguridad, Rafael Vera, y el director general de la Policía, José María Rodríguez Colorado, realizaron a Estados Unidos. También se trataron aspectos relativos al terrorismo internacional como la prevención de posibles atentados pro iraquíes en Europa.

La delegación norteamericana asiste en calidad de observadora al mandato italiano del Grupo de Trevi, formado por los ministros del Interior de los doce países de la Comunidad Europea.

En la delegación española existe gran optimismo sobre la inmediata entrada de España en el grupo de Schengen (experiencia piloto de seis países, Francia, República Federal de Alemania, Italia, Bélgica, Holanda y Luxemburgo para suprimir las fronteras interiores antes de la entrada en vigor de la unidad europea). Incluso se apunta que la integración podría realizarse en la presidencia correspondiente a Luxemburgo, esto es, a partir del próximo mes de enero.

Corcuera aprovechó también la reunión del Grupo de Trevi para mantener un contactos con su homólogo sueco, Berf Johansson, con el que intercambió puntos de vista sobre cuestiones relativas a la inmigración en los países comunitarios.

El ministro español del Interior y los representantes suecos, que al igual que los norteamericanos asisten a la reunión de Trevi como observadores, intercambiaron datos sobre el denominado problema escandinavo en materia de inmigración. El hecho de que Dinamarca, miembro de la CE, tenga un trato de favor con los inmigrantes de los restantes países nórdicos supone un grave problema al reforzamiento de las fronteras exteriores de la comunidad.

Los países comunitarios temen la llegada masiva de emigrantes del Este (en 1993 la Unión Soviética abre sus puertas a los que deseen salir) y están preocupados por el incremento de trabajadores procedentes del Norte de África y de los países nórdicos.

Finalmente, el ministro del Interior español también se entrevistó con su colega marroquí, quien visitará Madrid el próximo día 17. Ambos trataron sobre los problemas que planteará la próxima exigencia española de visado a los ciudadanos magrebíes.