Uno de los detenidos se confiesa culpable del triple homicidio de los novilleros
La juez del Juzgado de Primera Instancia de Cieza (Murcia), Pilar Rubio, manifestó ayer que uno de los tres detenidos por el homicidio de tres novilleros en la finca Charco Lentisco ocurrido en la madrugada del pasado sábado se había declarado culpable. La juez declinó identificarle y ratificó que continuaba el secreto del sumario.
A primera hora de la mañana, Pilar Rubio recorrió la finca Charlo Lentisco, acompañada de funcionarios del juzgado y miembros de la Guardia Civil. A su regreso a Cieza, informó que habían sid o encontrados en el campo varios capotes o muletas de torear, aunque indicó que no se podía precisar si pertenecían a los toreros fallecidos.Al secreto del sumarlo, Pilar Rubio unió una especial cautela para responder a los periodistas. Sentada ante la mesa de trabajo, muy tensa, fumaba continuamente y con frecuencia contestaba mediante monosílabos.
¿Va a levantar el secreto del sumario? "Lo levantaré, no puedo decir cuándo". ¿Se van a reconstruir los hechos? "Se reconstruirán, no puedo decir cuándo". Si uno de los detenidos ya se ha confesado culpable, ¿qué ocurre con los restantes? "Continúan en prisión". ¿Volverá hoy a Charco Lentisco? "No". ¿Va a tomar declaración a otras personas? "Sí". Preguntas y respuestas se producían con parecido laconismo y la juez pareció acentuar la precisión de sus declaraciones cuando se le preguntó por el número de disparos que habían recibido las víctimas y lo que al respecto pudiera contener el informe del forense, José Fernández del Rincón. Dijo: "De este informe no puede deducirse cuántos disparos recibieron las víctimas". Entonces, cabe suponer -se le sugirió- que estaban literalmente destrozadas... Pilar Rubio, sorprendida, respondió: "Esa conclusión es suya, no mía".
Declaraciones
Al parecer, en aquellos momentos -mediodía de ayer- estaba pendiente de recibir el informe de balística. A continuación, y ya ininterrumpidamente hasta las 20.30 -salvo una pequena pausa para almorzar en un restaurante cercano- la juez de Cieza permaneció en su despacho, donde tomó declaración a los padres de los chavales detenidos y al albañíl dueño de la escopeta que presuntamente se utilizó en el suceso. Finalmente tuvo una entrevista con los abogados defensores y, a petición de éstos, compareció ante los periodistas, únicamente para pedir que no hicíeran conjeturas sobre los sangrientos sucesos de Charco Lentisco, pues, dijo "han alcanzado una dimensión desmesurada y pueden perjudicar gravemente a muchas personas".
Los dos muchachos detenidos ejercían de pastores en la finca Charco Lentisco. Uno de ellos, Pedro Antonio Yepes, de 15 años, fue entregado a última hora de la tarde de ayer a la tutela del Tribunal de Menores. Su hermano José Manuel, de 19 años, permanece en la prisión de Murcia, igual que Manuel Cuesta, el ganadero y propietario de la finca.
Al padre de estos hermanos, José Yepes, y a su esposa, les fue tomada declaración por separado. José Yepes manifestó que estaba deseando se levantara el secreto de sumarlo para poder hablar.
Uno de los aspectos de la investigación se centraría en el número de escopetas con que se mató a los tres toreros. En la finca sólo estaba la del albañil -un experto cazador- y por la naturaleza de los disparos, pudieron utilizarse dos o más.
En el camino de Calasparra
José Yepes, capataz de la finca Charco Lentisco, es oriundo del valle de Ricote, un paraje intrincado de la sierra del mismo nombre, relativamente cercana a Cieza, que habita un asentamiento humano de acusada personalidad. Son gentes en general bajas de estatura, complexión robusta, carácter fuerte, genio vivo y con una fisonomía que recoge ciertos rasgos árabes, propios de sus orígenes.Charco Lentisco se encuentra en el camino de Calasparra. Se trata de un bonito paraje de suaves ondulaciones, donde hay ganadería brava -aún con pocas cabezas- formada por vacas de Álvaro Domecq -según comentaba el propio Jesús Yepes- y caballos de raza. El propietario, Manuel Cuesta, es un adinerado industrial que fabrica papel continuo.
En medios taurinos albacetenses extraña que Lorenzo Franco El Loren, una de las víctimas, toreara vaquillas furtivamente, pues se trataba de un torero profesional, al que ganaderos de la provincia invitaban a sus tentaderos.
Entre los habitantes de Cieza hay consternación y además les preocupa la mala imagen de la población. Justamente -añaden- pues si bien se ha producido en su término municipal, ninguno de los implicados es ciezano. Efectivamente, las víctimas son albacetenses; dos de los inculpados, proceden del valle de Ricote, y otro -el propietario de la finca- es de Molina del Segura.
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