Los socialistas no ven con agrado el ingreso de Carrillo en sus filas

La nueva Comisión Ejecutiva Federal del PSOE, que se reunió por primera vez el pasado miércoles, debatió el resultado del 32º congreso, la situación en Cantabria, las negociaciones con el PNV en Euskadi y los congresos regionales que deberán celebrarse desde ahora hasta el próximo mes de febrero. Fuera del orden del día, se suscitó la propuesta, aún no formalizada, del Partido de los Trabajadores de España (PTE), que dirige Santiago Carrillo, de ingresar en el PSOE con carácter de corriente de opinión eurocomunista, lo que fue rechazado por la ejecutiva como planteamiento general.

El criterio de la ejecutiva es absolutamente contrario y tan sólo considera posible el ingreso en el PSOE de militantes del PTE "uno a uno". Lo cierto es que este ingreso viene produciéndose desde hace tiempo en los niveles provinciales y regionales. El comentario de miembros de la ejecutiva respecto a si Carrillo sería admitido si lo pidiera fue claramente negativo por razones "históricas". En la dirección del PSOE se asegura que "entre los veteranos del partido" levantaría ronchas la presencia del antiguo líder comunista. Santiago Carrillo fue, además, en su juventud dirigente de las Juventudes Socialistas.

Guerra resalta la unidad

Alfonso Guerra, vicesecretario general del PSOE, resaltó en la reunión de la nueva ejecutiva federal "la unidad" de ese partido tal y como se había puesto de manifiesto en el 322 congreso del PSOE celebrado hace 15 días. Guerra comparó la situación de "cohesión" con la que viven otras fuerzas políticas y, en concreto, citó al Partido Popular por los últimos episodios de disidencia ocurridos en Cantabria y Cataluña.El número dos del PSOE, Alfonso Guerra, hizo un análisis muy favorable del congreso de su partido y de sus resultados toda vez que era la primera vez que se reunía la nueva ejecutiva federal emanada de dicho congreso. El vicesecretario resaltó la unidad y la cohesión demostrada por el PSOE, para contraponerla con otras fuerzas políticas, especialmente con el PP.

La ejecutiva, que debatió fundamentalmente sobre la situación planteada en Cantabria por el presidente de la comunidad, Juan Hormaechea, escuchó también un informe del secretario de organización y presidente de los socialistas vascos, Txiki Benegas, sobre el curso de las negociaciones con el PNV al objeto de culminar si es posible la repetición de los acuerdos de Gobierno de la anterior legislatura.

La posición oficial de los socialistas continúa siendo la de mantenerse un tanto inflexibles y reiteran que las negociaciones en Euskadi están resultando "duras y difíciles". El PSOE se queja de que los dirigentes del Partido Nacionalista Vasco les tratan como si fueran meros interme diarios del Gobierno de Madrid por lo que las reuniones se plan tean en el terreno relvindicativo, para presentar solicitudes hacia el Gobierno central.